El Ejército israelí justificó su incursión en Al Shifa alegando la presencia de instalaciones de Hamás. Sin embargo, las denuncias palestinas indican una devastación masiva en el hospital. Equipos médicos destrozados, patios arrasados y testimonios de personal médico transportando pacientes entre escombros reflejan la gravedad del asalto.
Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, la incursión incluyó la destrucción deliberada de equipos médicos vitales, como máquinas de radiología y de resonancia magnética, además de la detención de técnicos esenciales para el funcionamiento del hospital.
Se acusa a las fuerzas israelíes de utilizar tácticas coercitivas: colocar dispositivos de reconocimiento, interrogar y detener a pacientes y personal médico. El Ministerio de Sanidad denuncia crímenes de guerra, alegando que el hospital fue utilizado como escudo humano por las tropas israelíes.
Además, la agencia oficial palestina, Wafa, reportó la intrusión de maquinaria militar israelí en los patios del hospital, lo que ha agravado la situación de emergencia y ha dificultado aún más la prestación de servicios médicos básicos.
Hallan centro de mando
El Ejército israelí dijo que encontró «un centro de mando, armas y activos tecnológicos» en el hospital Al Shifa, durante su operación militar.
«Un centro de mando operativo, armamento y activos tecnológicos fueron encontrados en el edificio de resonancia magnética» del hospital, el más grande de la Franja y situado en el centro de la ciudad de Gaza, dijo un portavoz militar israelí en un comunicado, que aseguró por ahora «sigue la operación precisa y selectiva» en el lugar, que arrancó esta pasada madrugada y ya dura más de medio día.
Impacto humanitario
Las consecuencias del ataque se han extendido más allá de la destrucción física. La Franja de Gaza, ya al límite por conflictos previos, enfrenta una crisis humanitaria desgarradora. Miles de muertos y heridos, una cantidad alarmante de desaparecidos bajo escombros y más de 1.7 millones de personas desplazadas, la mayoría civiles, sumergen a la región en un caos indescriptible.
El Ministerio de Sanidad destaca la dificultad para obtener un recuento preciso de las víctimas debido al colapso de las comunicaciones en toda la Franja. Las estimaciones actuales sugieren más de 11,500 muertos y cerca de 30,000 heridos, con un impacto desproporcionado en mujeres, niños y ancianos.