A pesar de que algunas versiones informan la reapertura del cruce ferroviario en la frontera norte, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos, hasta el momento, no se ha confirmado el libre tránsito comercial en ese puente.
Por la noche de ayer, el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), José Abugaber, informó sobre la apertura de ese cruce fronterizo con Estados Unidos.
“Podemos informar que el gobierno de Estados Unidos acaba de ordenar la reapertura de los cruces fronterizos ferroviarios de Eagle Pass y el Paso, Texas”, indicó el dirigente de los industriales en su cuenta de X
Sin embargo, el puente no se ha reabierto y se mantiene cerrado desde hace tres días.
De hecho, el presidente Andrés Manuel López Obrador, informó que su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, le pidió una llamada telefónica para abordar el tema migratorio, por lo cual no se descarta que se aborde el tema de la reapertura de ese cruce fronterizo en Eagle Pass y el Paso.
Datos a octubre de este año publicados por el Bureau of Transportation Statistics señalan que el 11.5% del valor de la carga que pasa por la frontera binacional se transporta por tren. Mientras que el 28.2% del valor de la carga que se transportó por esta vía fue por Eagle Pass y el 8% por el Paso. En conjunto son el 36% del valor total transportado por tren en la frontera México-Estados Unidos.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus iniciales en inglés) anunció el domingo que suspendería temporalmente las operaciones ferroviarias en Eagle Pass y El Paso desde el lunes sin precisar cuánto tiempo.
De acuerdo a la Coparmex, las pérdidas económicas por el cierre de cruces ferroviarios en la frontera norte del país ascendieron a 200 millones de dólares en dos días y la congestión de más de 10 mil carros de ferrocarril por la medida que impuso el gobierno de Texas en un intento por atajar el aumento del flujo de migrantes.
Por ello, habría llamado a la Secretaría de Relaciones Exteriores y a la Secretaría de Economía, así como a sus homólogos en los Estados Unidos, particularmente al Gobierno Federal y al gobierno de Texas, para abordar la crisis migratoria sin afectar los flujos de mercancías, pues acusó que esta medida solo genera perjuicios para la economía de ambas naciones.
“En la atención y resolución a la crisis de la migración no pueden caber los cálculos político-electorales, pues eso daña a ambas sociedades, pone en riesgo vidas humanas y frena el desarrollo económico de los dos países”, acusó.
José Medina Mora, líder de la COPARMEX aseveró que este tipo de acciones unilaterales tomadas por el gobierno de Texas “son un claro ejemplo del fracaso de la política migratoria en Estados Unidos y en México”.