El mazapán es un maravilloso dulce que, en México, generalmente está hecho a base de cacahuate molido con azúcar glass. Esta delicia llegó a tierras mexicanas por herencia de la gastronomía española, sin embargo, su origen es aún incierto, ya que muchos lugares europeos se adjudican su creación y también se han encontrado registros de preparaciones muy parecidas en la cultura egipcia y árabe, por lo que determinar su origen con certeza es una tarea muy difícil de llevar a cabo.
En México, el ingrediente principal de este dulce es el cacahuate, no obstante, la receta original que llegó a nuestro país fue la perteneciente a la orden de las Clementinas (de San Clemente en Toledo), cuya base estaba hecha de almendras. Se dice que a las monjas de esta orden se les pagaba el arriendo de sus tierras con granos y comestibles y que la preparación del mazapán fue la opción que encontraron para evitar que las almendras perecieran antes de ser consumidas.
De igual modo, existe otra versión del origen del mazapán, la cual alude a que en el año 1212, derivado de la Batalla de las Navas en Tolosa, hubo una gran escasez de alimento, por lo que las religiosas trataron de elaborar pan a base de almendras trituradas con azúcar, que era lo que tenían a la mano. La masa que resultaba de la trituración de estos dos ingredientes era horneada, obteniendo una especie de panecillos dulces. Se supone que el nombre del “mazapán” viene de una combinación de palabras: “maza”, que era el instrumento que se utilizaba para triturar las almendras peladas, y “pan” que era el producto que se esperaba obtener de esta mezcla.
Tal vez el origen del mazapán como tal, no es muy certero aún, pero la esencia de éste es muy clara: mezclar almendras o algún otro grano molido con azúcares naturales. Es por ello que existen diversas variantes del dulce, al igual que los usos alimentarios que se les ha dado a lo largo de la historia.
Algunos relatos alemanes aluden a que se llegó a recomendar el consumo del mazapán con fines medicinales, ya que se creía que los beneficios de la miel y las almendras con las que estaba elaborado, ayudaban a mantener una buena salud, catalogándolo como “alimento fortalecedor” o “pan energético”. De hecho, algunos autores creen que el origen del mazapán pudo haberse dado en el ámbito farmacéutico, con la intención de encontrar alguna masa dulce que enmascarara un poco los sabores fuertes y amargos de los remedios para múltiples padecimientos.
Debido a que muchos países y regiones reclaman la creación del mazapán como propia, es difícil asegurar su raíz. A pesar de ello, lo que es un hecho es que su consumo se encuentra extendido por gran cantidad de países europeos, y que a su vez, esta influencia llegó a México con sus respectivas modificaciones, permitiéndonos disfrutar de él prácticamente en cualquier época del año, a diferencia de otros países como España, en donde es considerado un dulce tradicional de temporada navideña.
Se cree que esta costumbre deriva de cuando el Rey Felipe II acostumbraba regalar mazapanes en la víspera de las celebraciones navideñas, debido a que en ese entonces, el consumo del mazapán estaba casi destinado a los estratos sociales más altos, a causa de su elevado costo de producción. Posteriormente, se volvió más accesible, pero se conservó la costumbre de consumirlo en las festividades decembrinas.
Mucha historia hay detrás de este deliciosos dulce que ha ganado el corazón de muchos alrededor del mundo, ya que la sencillez de su elaboración y de los ingredientes que lo conforman le da puntos a su favor, pues los sabores de las diferentes versiones de mazapán son siempre dulces, sutiles y muy agradables en gusto y textura.
El mazapán mexicano elaborado con cacahuate ha ganado renombre a nivel internacional, siendo considerado parte importante de la identidad gastronómica nacional.