Edificado en 1641 para refugiarse de los piratas, el ‘Fortín de la Encarnación’ se ha transformado con el paso del tiempo y hoy es un espacio de disfrute para las familias.
Joel Rubio
Villahermosa
Lo que un día fue conocido como el ‘Fortín de la Encarnación’ construido en 1641 y que servía para guardar pertrechos militares y como refugio de la población durante los ataques de los piratas, en la actualidad este lugar en la calle 5 de mayo y Zaragoza se ubica el recién remodelado ‘Parque de los Pajaritos’.
De acuerdo a la Historia del Centro Histórico de Villahermosa, el Centro es la parte principal del casco antiguo de la ciudad, se extendió sobre la loma llamada ‘La Eminencia’, donde en 1564 al fundar oficialmente la ciudad Diego de Quijada trazó la Plaza de Armas y que aún se conserva en el mismo lugar, en dicha loma frente a la plaza, en 1614 se concluyó la primera iglesia que existió en la ciudad, dedicada al Santo Patrono San Juan Bautista.
Otra parte del Centro ocupó la loma de ‘La Encarnación’ cuya cuesta es hoy la calle 5 de Mayo y en donde estuvo el ‘Fortín de la Encarnación’ construido en 1641 y que servía para guardar pertrechos militares y como refugio de la población durante los ataques de los piratas.
En octubre del año pasado dieron inicio los trabajos de rehabilitación del parque localizado dentro del Barrio Mágico de Villahermosa, ubicado en la esquina de las calles Ignacio Zaragoza y 5 de Mayo.
Dentro de las tareas de remodelación se atendieron las áreas verdes, instalaciones eléctricas e hidráulicas, de adoquines, piso del parque, bancas, mobiliario urbano, fuente decorativa, poda de árboles, entre otras acciones, conservando su esencia original.