Brasil, en emergencia dengue

Las alarmas sanitarias se han vuelto a encender en Brasil, pero esta vez no es por el virus del COVID, sino por el virus del dengue que transmite el mosquito.

Sólo en enero, Brasil registró 40 muertes por dengue y otras 265 en investigación, así como de 364.855 casos, casi cuatro veces más que el mismo mes del año pasado, según datos oficiales. Se trata de un aumento inaudito desde que hay registros, un 252%, y las autoridades señalan básicamente a un culpable: el calentamiento global, responsable de que el fenómeno de El Niño se haya intensificado como nunca y está haciendo estragos en toda Sudamérica, como los incendios explosivos en Chile desde el fin de semana, con más de 130 muertos.

“Movilización nacional”

La ministra brasileña de Salud, Nisia Trindade Lima, hizo este martes un llamado para que todo el país se una para enfrentar el fuerte aumento de los casos de dengue en el país.

«Hago un llamado a todos para movilizarnos a nivel nacional, desde los gobiernos y desde la sociedad en su conjunto, para que juntos podamos enfrentar rápidamente los brotes actuales», dijo la ministra durante una alocución televisiva transmitida a nivel nacional.

Durante su intervención, la jefe de la cartera de Salud recordó que los hogares son los que más requieren de un cuidado especial, pues es allí donde se concentra el 75% de las transmisiones.

En este sentido pidió a los brasileños realizar acciones simples como mantener tapados los tanques de agua, eliminar correctamente las basuras y mantener siempre limpios los recipientes de agua de los animales.

Para enfrentar la situación, el Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha destinado un total de 256 millones de reales (52 millones de dólares) para acciones que permitan enfrentar la crisis sanitaria.

Campañas masivas de divulgación, la cualificación de 12,000 profesionales -entre médicos y enfermeros-, la puesta en marcha de una sala nacional de monitoreo para conocer, en tiempo real, la situación del virus en el país y la incorporación de la vacuna en el sistema público de salud, están entre las principales.

No obstante, la ministra reconoció que la falta de vacunas ha sido uno de los obstáculos por las dificultades de los proveedores, por lo que la campaña de inmunización estará destinada principalmente a menores entre 10 y 14 años de edad, de 521 municipios del país ubicados en regiones con alta incidencia de casos.

Emergencia en plenos carnavales

El epicentro de la alerta sanitaria es Río de Janeiro, la ciudad que se dispone a recibir a cientos de miles de turistas de todo el mundo para celebrar el Carnaval.

El pasado lunes, la alcaldía de la capital carioca decretó el estado de emergencia en salud pública ante el incremento meteórico de casos y este miércoles reportó la primera víctima mortal confirmada del año por la enfermedad.

Según datos oficiales, Río, la ciudad más turística del país, registra más de 10,000 casos de dengue en enero, frente a los 22,959 que reportó en todo el año 2023.

La tasa de incidencia de la enfermedad en Río es ahora de 160.68 casos por cada 100,000 habitantes.

“Desafío significativo”: OMS

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, calificó este miércoles de «desafío significativo» el brote de dengue que se registra en Brasil y lo vinculó al fenómeno climático de El Niño, potenciado desde hace meses por el calentamiento global.

«El actual brote de dengue ha sido alimentado por El Niño», declaró durante un acto en Brasilia Tedros, quien enmarcó el incremento de casos en el país suramericano en una expansión global de esta enfermedad, que dejó 5,000 muertes en 2023 en todo el mundo.

Según el director general de la OMS, «todas las regiones, excepto Europa, están afectadas» por la ola de dengue, que es transmitido por mosquitos y provoca fiebres altas y fuertes dolores musculares, entre otros síntomas.

Al mismo tiempo, Tedros felicitó al Gobierno de Brasil por su respuesta al brote y por haber introducido la vacuna contra el dengue en los protocolos del sistema público de salud.

«El brote pone en evidencia la necesidad de seguir fortaleciendo el sistema de salud», dijo y reclamó una respuesta «holística (en su totalidad, no por separado) que coloque a las personas en el centro» de la atención.