Centenares de agentes antidisturbios irrumpieron en el campus de la Universidad de Columbia para dispersar una manifestación estudiantil que demandaba un cese al fuego en Palestina.
Decenas de agentes ingresaron al edificio Hamilton Hall utilizando una escalera eléctrica y equipo para cortar alambres.
Previamente, la policía había empleado gas lacrimógeno para evitar la toma de un edificio, según reporta un artículo del New York Times.
La ocupación comenzó durante la noche, cuando los manifestantes rompieron ventanas y tomaron Hamilton Hall, donde desplegaron una pancarta que rezaba “Hind’s Hall”, cambiando simbólicamente el nombre del edificio en honor a una niña palestina de 6 años asesinada en Gaza por el ejército israelí.
En las afueras del edificio neoclásico de ocho pisos, que ha sido testigo de varias ocupaciones estudiantiles desde la década de 1960, los manifestantes bloquearon la entrada con mesas, se unieron brazo con brazo para formar una barricada y corearon consignas en apoyo a Palestina.
En una conferencia de prensa posterior, el alcalde Eric Adams y funcionarios de la policía de la ciudad declararon que la toma de Hamilton Hall fue instigada por “agitadores externos” que no están afiliados a Columbia y que son conocidos por las autoridades por generar disturbios.