Por: Emilio de Ygartua M.
“La democracia en América Latina es una promesa que no hemos podido cumplir”
Octavio Paz
Tras la muerte de Hugo Chávez en 2013, Nicolás Maduro asumió el liderazgo del chavismo y ganó las elecciones presidenciales de ese mismo año. Su mandato ha estado marcado por una severa crisis que, además, ha derivado en una creciente emigración de venezolanos a países limítrofes, hacia norteamérica y Europa. Venezuela ha enfrentado una severa crisis económica, con hiperinflación, escasez de alimentos y medicinas, y un colapso de los servicios públicos.
El gobierno de Maduro ha sido acusado de erosionar la democracia, controlando las instituciones, reprimiendo a la oposición y violando derechos humanos. Millones de venezolanos han abandonado el país debido a la crisis, generando una crisis humanitaria regional.
¿Fraude Electoral del 28 de Julio? La controversia en torno a un presunto fraude electoral debido a la falta de un recuento transparente de votos podría generar varias reacciones. La presión internacional podría forzar investigaciones independientes para validar los resultados. La mediación de organismos internacionales podría propiciar un diálogo entre el gobierno y la oposición para resolver la crisis, pero, al momento, no se observa ninguna intención del gobierno de Maduro de retroceder un ápice.
¿Quién ganó en Venezuela? En un extenso artículo Kiko Laneras (El País. 01 agosto 24), especialista en temas electorales y su medición, señala que los datos de la oposición son más verificables que los oficiales. “Violar la transparencia de un proceso electoral hace dificilísimo verificarlo. Pero la evidencia aportada hasta ahora es desigual: la oposición ha presentado más detalles, se expone a evaluación y gana credibilidad”
El ex presidente del gobierno español Felipe González, integrante del Grupo Idea, profundo conocedor de América Latina y defensor de la democracia en Iberoamérica, califica de burdo fraude el proceso electoral que vulnera el Estado de Derecho lo ocurrido en la nación caribeña. “Maduro es un dictador arbitrario. Se comporta como un tirano que no cumple ni sus propias reglas”.
En la semana posterior al proceso electoral se han dado protestas y movilización sociales. La oposición está dispuesta a intensificar las protestas internas y buscar apoyo internacional. Estas acciones ya han derivado en más de una docena de muertos y miles de encarcelados, entre ellos, líderes de partidos de oposición. Maduro ha plateado el arresto del principal candidato opositor y de la figura principal de ese frente: Edmundo González, candidato, y Corina Machado, lideresa de la oposición venezolana, que fue impedida de estar en las boletas electorales.
Ante la medida del gobierno venezolano expulsar a diplomáticos de naciones que se han manifestado en contra del proceso, el jueves pasado el gobierno de Brasil asumió la embajada de Argentina en esa nación caribeña con el compromiso de “proteger a los seis opositores refugiados allí.
¿Cuál será la actitud de Estados Unidos? Washington, históricamente crítico del régimen de Maduro, podría imponer nuevas sanciones económicas y diplomáticas contra funcionarios venezolanos. Podría seguir reconociendo a líderes opositores como representantes legítimos de Venezuela.
El gobierno de Biden, la virtual candidata demócrata, Kamala Harris, y el secretario de Estado Antony Blinken, ha emitido fuertes señalamientos por lo que ya califican como “fraude electoral”.
Estados Unidos ha “declarado el triunfo de la oposición”, en su clásico estilo imperial. Esta declaratoria dará argumentos a Maduro y fortaleceré el discurso de los aliados del gobierno venezolano. Lo peor de todo es que se repita la historia y no haya cambio en Venezuela y la democracia se siga sacrificando.
Inácio Lula da Silva, el mandatario brasileño, de ha unido a Joe Biden para demandar al gobierno venezolano la presentación de las actas. Maduro ha ofrecido hacerlo, pero existen justificadas dudas de que las actas que presenten no demuestren otra cosa que la victoria oficialista.
Por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA), bajo la dirección de Luis Almagro, que ha sido muy crítica del gobierno de Maduro, buscará emitir una declaración condenando el fraude y llamará a la realización de nuevas elecciones libres y justas. Podría impulsar sanciones y medidas diplomáticas para presionar al régimen de Maduro. Todo eso es posible, pero el miércoles pasado fracasó en su intento al no reunir el número de votos necesarios por abstenciones o ausencias, entre las que estuvo la de la canciller mexicana, Alicia Bárcenas.
¿Cuál ha sido la postura de los gobiernos de izquierda y derecha en América Latina frente a este proceso? Gobiernos como los de Cuba y Nicaragua, que han sido aliados de Maduro, continuarán apoyándolo. Otros gobiernos de izquierda podrían adoptar una postura más neutral, llamando al diálogo y la paz. Petro, Colombia, Boric, Chiile y Lula Da Silva, si bien han sido moderados, piden se tranparenten las actas para que se legitime el triunfo que anuncia Maduro o se reconozca el triunfo de la oposición.
En México, el presidente y la virtual primera presidenta de nuestro país piden se concluya el conteo de los votos, pero esta postura deberá tomar pronto una ruta que espero no sea reconocer el triunfo de Maduro si no se demuestra la legalidad del proceso. El gobierno mexicano ha sido adherente solidario de gobiernos de izquierda en la región, es una tradición, sí, pero no puede cerrar los ojos ante los signos autoritarios y dictatoriales que caracterizan a países que ya no son de izquierda como Venezuela y Nicaragua.
El caso cubano también deberá ser visto con nuevos ojos ante el evidente fracaso de un modelo que requiere un replanteamiento antes de que el hartazgo de la gente termine generando una involución de la revoución cubana que en su momento muchos admiramos.
Países con gobierno de derecha como Argentina, Uruguay, Paraguay, Costa Rica, República Dominicana y Panamá, se han manifestado abiertamente contrarios a reconocer el triunfo oficilista. El gobierno de Maduro ha respondido retirando a sus embajadores de esos países y pidiendo a esas naciones hagan lo mismo. Posturá que aislará más a la nación caribeña que si bien se opone al injerecionismo externo, no da muestras de querer mostrar otra cara que no sea la del autoritarismo y la antidemocracia.
Cuba y Nicaragua seguirán siendo aliados firmes de Maduro, proporcionando apoyo político en resguardo del apoyo económico de Venezuela que es fundamental para su vida diaria. China, seguramente adoptará una postura de no intervención directa pero continuará con su apoyo económico y comercial, buscando estabilidad en la región y que sus intereses no se vean afectados, para que la “ruta de la seda” siga logrando adeptos, a pesar de los empeños de Washington por evitarlo. En cambio, Rusia podría, incluso, ofrecer un apoyo militar y diplomático más activo, al tiempo que critique las intervenciones occidentales y apoyando al régimen de Maduro sin tocar el tema del trasiego del proceso electoral tan cuestionado.
En suma, está claro que la situación en Venezuela tras el presunto fraude electoral podría intensificar las tensiones internas y externas, con diversas reacciones de actores internacionales basadas en sus intereses geopolíticos y alineaciones políticas.
“La izquierda en América Latina, al igual que la derecha, debe evitar el dogmatismo y el autoritarismo si realmente quiere contribuir al desarrollo democrático y social de la región”
Fernando Savater
La política en América Latina ha experimentado una variedad de enfoques y resultados con respecto a los modelos socialistas actuales. La visión de las izquierdas es totalmente heterogénea. El modelo soviético-cubano de los años sesenta del siglo pasado solo pervive en países como Cuba, Nicaragua y Venezuela. El modelo “chavista” tuvo influencia pero ha sido tergiversado por el gobierno de Nicolás Maduro. Podemos hablar de izquierdas en transición como las de México, Colombia y Chile.
En México, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha implementado programas sociales para combatir la pobreza y la desigualdad, como transferencias directas a los más pobres y becas educativas. El gobierno mantiene un enfoque en la intervención estatal en la economía con la intención de revertir la pobreza y la marginación de millones de mexicanos, pero ello se ha hecho manteniendo una economía de mercado, promoviendo inversiones privadas y respetando la propiedad privada. Ha enfrentado a un conservadurismo de derecha que no reconoce los avances sociales, habla de una crisis económica que no se observa en las cifras, al tiempo que busca descarrilar los avances que en favor de la sociedad se han alcanzado.
En Colombia, Gustavo Petro ha propuesto reformas para redistribuir tierras y aumentar el gasto social, buscando reducir la desigualdad. También ha impulsado una economía de mercado con Intervención estatal. Promueve una economía mixta con una fuerte intervención del estado en áreas estratégicas por lo que enfrenta resistencia significativa de sectores conservadores y desafíos de implementación de sus políticas en un contexto de violencia y narcotráfico.
En Chile, Gabriel Boric ha impulsado reformas en educación, salud y pensiones, buscando una mayor igualdad social. Aunque con una orientación progresista, mantiene una economía abierta y promueve la inversión extranjera.
Como en México y Colombia, Boric enfrenta resistencia de sectores empresariales y una sociedad dividida en términos de las reformas propuestas. Inacio Lula de Silva no escapa de este escenario. Luego de su victoria frente al ultraconservadurismo liderado por Jair Bolsonaro, un seguidor de las estrategias de Donald Trump, el histórico líder de la izquierda brasileña impulsa programas orientados a revertir los retrocesos económicos y sociales derivados del anterior gobierno. En el Congreso enfrenta a una oposición que busca impedir que triunfen sus propuestas.
Del otro lado están los defensores del modelo de viejo cuño, del lo que queda del socialismo real soviético en su peor versión. En Nicaragua, el gobierno de Daniel Ortega es conocido por su control autoritario, con poca tolerancia a la oposición y medios de comunicación independientes. Se ha impuesto una economía centralizada. Hay un control estatal significativo sobre la economía, aunque con algunos sectores privados. La nación centroamericana enfrenta sanciones internacionales y una crisis de derechos humanos y libertades civiles. Están en la cárcel miles de opuestos al régimen, y otros muchos han sido expatriados por oponerse a las normativas impuestas por quien fuera figura importante de la Revolución sandinista pero hoy francamente alejado de ese momento histórico que puso fin a la dinastía Somosa, cuyos comportamientos han sido reciclados por el matrimonio en el poder.
En Cuba, luego de la muerte de Fidel Castro, y del aparente retiro de su hermano Raúl, el gobierno de Miguel Díaz-Canel vive una profunda crisis que ya no alcanza a justificarse solamente con el tema del injusto e inhumano embargo impuesto hace más de seis décadas por Estados Unidos; sansión que debe revertirse, sí, pero que no oculta el desgaste de un modelo está lejos de ser ejemplo para los países de la región.
Atorada en los tiempos de la “Guerra Fría”, con una orfandad que no ha encontrado sustituto, Cuba camina por una ruta que reclama un cambio que, es obivio, la dirigencia no está dispuesta a realizar aduciendo “traición” al legado de una revolución cuyos ideales están vivos, sí, pero sus estrategias totalmente desgastadas y rebasadas.
El socialismo centralizado no es más la vía para el desarrollo de la Isla que tiene hoy al 70% de su población en pobreza extrema. En los últimos cinco años la Isla ha visto reducir su población de 11 millones a 8.5 millones, no a causa de la reducción de nacimientos, sino de la emigración de cientos de miles de cubanos en busca de mejores formas de vida. Parsonas que huyen de una economía altamente centralizada y controlada por el Estado, con reformas limitadas hacia la apertura económica. La crisis económica se ha intensificado, con escasez de alimentos y medicinas, y un aumento significativo de la pobreza.
Finalmente, Venezuela, luego de una década de gobierno de Nicolás Maduro, que busca ampliar a toda costa, sustenta su plataforma ideológica en el llamadi “socialismo del Siglo XXI”, diseñado por Hugo Chavez. Un modelo con fuerte intervención estatal, nacionalizaciones y control de recursos naturales. Como ya se dijo, esta nación sufre una grave crisis humanitaria y económica: hiperinflación, escasez de bienes básicos y migración masiva
La crisis económica ha exacerbado la pobreza y la desigualdad, llevando a protestas y demandas de reformas. La polarización se intensifica con acusaciones de fraude electoral, lo que podría llevar a más protestas y posibles enfrentamientos.
El injerecionismo es una práctica que no tiene cabida en el apotegma jurista, es cierto, pero la no intervención de externos en los asuntos de las naciones, no justifica, no permite que se acepte que la democracia sea asesinada vulnerando el supremo derecho humano de los pueblos a elegir a sus gobernantes. Si Maduro demuestra que el proceso fue legal y su reelección legítima, que el mundo lo reconozca, pero si se ha conculcado la soberanía del pueblo venezolano para evitar un cambio, que el mundo lo condene.
“El asesinato de líderes de Hamas en Irán añade otra capa de complejidad y peligro a un conflicto ya de por sí volátil, aumentando la polarización regional”
Rashid Khalidi
El asesinato en Irán del líder moral de Hamas, Ismail Haniya, puede tener significativas repercusiones políticas en Oriente Cercano y agudizar la polarización si el gobierno iraní cumple con su promesa de castigar “este derramamiento de sangre en su territorio”.
Irán podría aumentar su apoyo a Hamas y otras facciones palestinas como respuesta al asesinato, utilizando el incidente para reforzar su postura antiisraelí y antiestadounidense. Además, podría intensificar sus operaciones y cooperación con grupos militantes en la región.
El asesinato de Haniya puede desencadenar una escalada en el conflicto entre Hamas e Israel, con un aumento de los ataques y represalias. Hamas buscará venganza, lo que resultará en una intensificación de la violencia en Gaza y posiblemente más allá.
La muerte de una figura prominente que si bien tuvo un triunfo electoral, perdió el control de Hamas, podría consolidar aún más a las facciones más duras dentro del régimen iraní, que abogan por una postura más agresiva contra Israel y sus aliados. Irán ha sido un partidario histórico de Hamas, proporcionando apoyo financiero, militar y logístico. Es probable que este respaldo se intensifique como resultado del asesinato, con Irán posiblemente enviando más recursos a Hamas y alentando una respuesta más agresiva contra Israel.
¿Cuál ser la postura de Estados Unidos? Biden se mantiene dubitativo sobre un tema que se le ha salido de las manos por el invariable apoyo al gobierno de Natanyahú, ratificado surante su reciente visitan a Washington, repudiada por miles de personas, incluso por legisladores que no asistieron a su cuarta alocusión en el Congreso
El madatario isralelí fue hasta Maimi para platicar con Donald Trump que le refrendó su total apoyo si es electo presidente. El candidato replublicano ha guardado silencio frente al asesinato de Hamiya, pero ha sido muy claro en su apoyo a Israel en su lucha contra Hamas, el no reconocimiento del Estado Palestino, y sobre las sanciones a Irán.
Kamala Harris que ya es prácticamente la candidata del Partido Demócrata a la presidencia (mañana conoceremos el n ombre de su compeñero o compañera de fórmula) fue muy clara con Natanyahú. “No aceptaremos ninguna acción que violente los derechos humanos”, señalamiento que evidencia el estilo estadounidense de no reconocer los excesos de sus aliados.
Como candidata y posible presidenta, Harris podría inclinarse hacia una continuidad de las políticas de Joe Biden, aunque con algunas diferencias. Harris podría seguir apoyando firmemente a Israel, pero también podría intentar una diplomacia más activa en la región, buscando reducir las tensiones a través de negociaciones indirectas. Podría haber un intento de reanudar o renegociar el acuerdo nuclear con Irán (JCPOA), aunque esto sería complicado por el aumento de la violencia y las tensiones regionales.
¿Cuál será la reacción de China y Rusia? La primera, probablemente llamará a la moderación y al diálogo, evitando una condena directa, pero reafirmando su política de no intervención. China podría aprovechar la situación para fortalecer sus lazos económicos y diplomáticos con Irán.
Por su parte, Rusia ha condenado el asesinato y utilizado el incidente para criticar las políticas de Estados Unidos e Israel en la región. Rusia, como aliada de Irán, podría aumentar su cooperación militar y estratégica con Teherán, mientras busca un rol mediador para aumentar su influencia en el Medio Oriente.
De lo que no me queda la menor duda es que el asesinato del líder moral de Hamas intensificará las tensiones regionales, afectará la política interna iraní complicada desde la muerte en un accidente de aviación de su presidente.
“La democracia en Estados Unidos está en peligro debido a la erosión de las normas democráticas y la polarización extrema”
Steven Levitsky y Daniel Ziblatt
¿Cuál debe ser la estrategia de Kamala Harris en la Convención Demócrata? Los expertos en campañas electorales señalan que la californiana debe enfocarse en una estrategia multifacética para asegurar una campaña electoral exitosa y captar a diversos grupos de votantes. Su discurso debe centrarse en la unidad y continuidad. Se considera obligado hacer un homenaje a Joe Biden. Reconocer su trabajo y su legado destacando la continuidad de sus políticas exitosas y su visión.
Llamar a la unidad dentro del Partido Demócrata, superando divisiones internas y fortaleciendo una coalición amplia, se presenta como el punto nodal de su discurso de candidatura. Un mensaje de Inclusión y esperanza. Un compromiso de luchar contra el discurso de odio. Condenar el discurso misógino y xenofóbico de la oposición, subrayando el compromiso con la igualdad y la dignidad para todos. Kamala debe enfrentar la posverdad con hechos y datos, promoviendo la transparencia y la confianza en la información verificada.
Trump señaló el miércoles de la semana pasada que su oponente es «afroamericana reciente” con la intención de mermar el apoyo clave de afroamericanos y de trabajadores a los que Harris señaló la semana pasada que “la garantía de sus trabajos y de sus derechos” es votar por su partido.
¿Cuáles deben ser los componentes de su discurso de aceptación en la Convención Demócrta? Mostrar una clara visión para el Futuro. Que va a impulsar una economía inclusiva. Harris tiene que presentar un plan económico que incluya inversiones en infraestructuras verdes, educación y sanidad accesible, y políticas laborales justas. Y, un tema en el que se ha distinguido, garantizar el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo: derecho pleno y legal al aborto.
Asimismo, tiene que comprometerse a combatir la desigualdad racial y económica, y a reformar el sistema de justicia penal para hacerlo más equitativo. Debe garantizar el fortalecimiento de la democracia y el respeto irrestricto al derecho al voto. Promover la protección y expansión del derecho al voto, asegurando elecciones libres y justas. Kamala debe comprometerse a encabezar un gobierno transparente que rinda cuentas y fortalezca a las instituciones democráticas.
Debe enfatizar su compromiso con la diversidad. Su gobierno debe dar la voz a los grupos marginadas. Su mensaje tiene que resaltar la importancia de las voces de las comunidades marginadas, incluyendo latinos, afroamericanos, mujeres, y migrantes. Debe asegurar que su administración será fiel reflejo de la diversidad de Estados Unidos en todos los niveles de gobierno.
Los que saben de comunicación política recomiendan como bases para una campaña electoral exitosa utilizar estrategia de comunicación eficaz. Uso de Medios Digitales. Utilizar redes sociales y plataformas digitales para llegar a un público amplio, especialmente a los jóvenes segmento fundamental para lograr su triunfo el 5 de noviembre próximo.
Contrario a sus oponentes republicanos, la narrativa de Kamal debe ser positiva. Tiene que contrarrestar el negativismo y la desinformación con una narrativa positiva y esperanzadora, destacando logros de la administración Biden, y, al tiempo, presentar iniciativas propias, planes concretos.
¿Cuáles son los grupos clave a los que debe dirigirse? Los indecisos. Debe presentar políticas claras y soluciones prácticas para atraer a los votantes indecisos, mostrando un liderazgo competente y confiable. Latinos y Afroamericanos. Tiene que fomentar la participación de estos grupos a través de políticas específicas que aborden sus necesidades y preocupaciones, y asegurando una representación significativa en la campaña.
El tema de los migrantes tiene especial relevancia y debe tratarlo con especial cuidado porque este asunto ya genera preocupación en millones de migrantes que ya están en Estados Unidos, legal o ilegalmente, y que ven a la migración creciente como un riesgo.
Debe proponer una reforma migratoria integral que promueva la justicia y la humanidad, y que proporcione seguridad y oportunidades para los migrantes, pero buscando que su llegada no se vea como un riesgo para la estabilidad laboral de los que ya están allá.
Lamentablemente, Kamala no ha comprado el planteamiento del presidente López Obrador de que la mejor formar de reducir lasmolas migratorias es general riqueza, empleos y seguridad en las naciones expulsoras. Sería muy buen que en su prpgrama de campaña se ofrecieran algunas alternativas orientadas a ese propósito.
Pero todo lo anterior será en vano si Kamala no logra movilizar a la base de su partido; si no logra incentivar la participación activa de los voluntarios y la comunidad en su campaña, creando un movimiento de base robusto. Tiene que generar alianzas estratégicas con organizaciones comunitarias, sindicatos, y grupos activistas para ampliar el alcance y la influencia de la campaña.
Esto será posible si, solo sí, Kamala es capaz de construir una agenda de políticas progresistas en materia de salud y educación. Debe proponer políticas públicas que aseguren el acceso a la salud y la educación de calidad para todos; y, presentar un plan audaz para combatir el cambio climático y fomentar la transición a energías renovables que si bien son temas de la agenda de Joe Biden, deben seguirse impulsando porque este tema, el del cambio climático, debe ser utilizado políticamente pafra evidenciar el negacionismo de los republicanos.
Muchos son los que confían en que Kamala Harris llevará a la Convención Demócrata un mensaje fuerte y unificador. Debe arrancar con una campaña inclusiva y basada en hechos. Su éxito dependerá de su capacidad para inspirar confianza, movilizar a diversos grupos de votantes, y presentar una visión clara y progresista para el futuro de Estados Unidos. Cien días complejos sí. Pero con la esperanza, lo reconozco, de que la hoy vicepresidenta de los Estados Unidos construya un muro infranquable que evite que la derecha ultraconservadora regrese a la Casa Blanca.
“El uso continuo de combustibles fósiles está llevando al planeta al borde del colapso. La transición a energías limpias no es solo una opción, es una necesidad urgente”
David Attenborough
Existe un rezago evidente en México en su tránsito de las energías fósiles a las energías limpias que hoy se enfoca en temas nodales como el hidrógeno verde, que en países como España y Chile está teniendo un avance muy importante. El gobierno de Claudia Sheinbaum, debe implementar diversas estrategias para revertir el retraso en el desarrollo de energías renovables y alinearse con la presión internacional para la transición hacia energías limpias.
¿Cuáles pueden ser las estrategias para para Impulsar esa transición?
Políticas y regulaciones favorables. Incentivos fiscales y Financieros. Necesario frecer subsidios, créditos fiscales y financiamiento preferencial para proyectos de energías renovables.
Se requiere un marco regulatorio claro. Se deben establecer y fortalecer regulaciones que faciliten la inversión en energías limpias, incluyendo la simplificación de permisos y licencias. Se tienen que invertir en el desarrollo de infraestructura. Se requiere contar comn una red eléctrica inteligente. Para ello es urgente invertir en la modernización de la red eléctrica para integrar eficientemente energías renovables intermitentes como la solar y la eólica.
El almacenamiento de energía es fundamental; para ello, se necesita promover la inversión en tecnologías de almacenamiento de energía, como baterías de litio, para mejorar la estabilidad y la gestión de la energía renovable. Al tiempo, se requiere fomentar la investigación y el desarrollo.
La innovación tecnológica es tarea priortaria, por ello se debe apoyar la investigación en nuevas tecnologías de energías renovables y eficiencia energética. Es una muy buena iniciativa del próximo gobierno crear una secretaría orientada a impulsar la investigación y promover la innovación. Considero necesario que esa nueva dependencia tenga el control de la formación tecnológica y universitaria, pública y privada.
Avanzar en este rubro requiere de la colaboración internacional. México debe participar en proyectos internacionales y acuerdos de colaboración para el intercambio de conocimientos y tecnologías.
Más que necesario, prioritario es generar campañas de concientización; promover la adopción de energías renovables a través de campañas de educación pública y programas escolares. Se deben implementar programas de formación y capacitación para desarrollar una fuerza laboral calificada en el sector de energías limpias.
¿Cuál debe ser el papel de Pemex en la próxima administración? Primero que todo resolver su situación financiera. Acto seguirdo, implementar la diversificación energética. En pocas palabrar, una transición a energías Renovables. Pemex debe diversificar sus inversiones hacia proyectos de energías renovables, aprovechando su infraestructura y capacidad de inversión.
La reducción de emisiones de carbón es un compromiso insoslayable. La próxima administración debe enfatizar en desarrollo de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CCS) y mejorar la eficiencia en sus operaciones para reducir la huella de carbono. Sumado a lo anterior está la necesidad de generar progrmas orientados a la exploración y producción de hidrógeno verde. Se debe utilizar energía renovable para la producción de hidrógeno verde, aprovechando su potencial como combustible limpio y como medio de almacenamiento de energía. Para que este modelo sea exitoso, se debe invertir en infraestructura para la producción, almacenamiento y distribución de hidrógeno verde.
¿Cómo se puede explotar el litio y lograr la transición al hidrógeno verde? La explotación sostenible del litio se liga a una minería responsable. El mpróximo gobierno debe asegurar prácticas de minería responsables y sostenibles para la extracción de litio, minimizando el impacto ambiental. Se debe crear una cadena de valor completa en torno al litio, desde la extracción hasta la fabricación de baterías, fomentando la industrialización local.
Inisisto en que se debe fomentar la producción de hidrógeno verde mediante incentivos que alienten proyectos privados, nacionales y extranjeros, para su generación, sujetos a una normativa clara fundada el Estado de Derecho. Esencial generar incentivos para la inversión en la producción y utilización de hidrógeno verde en sectores como el transporte, la industria y la generación de electricidad. ¿Cómo? Desarrollando proyectos piloto de hidrógeno verde y escalarlos a nivel nacional, colaborando con el sector privado e instituciones académicas.
¿Cómo podemos en seis años cumplir con los compormisos establecidos en la Agenda 2030 de la ONU caminar hacia la transición a energías limpias? Claudia coonoce bien el tema. Se requiere de un Plan de Acción para las energías limpias, con objetivos claros. Que establezca metas concretas, medibles y ambiciosas para la adopción de energías renovables, alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, lo que obliga a implementar mecanismos de seguimiento y evaluación para asegurar el cumplimiento de los objetivos, con transparencia y rendición de cuentas.
Nuestro país debe ser un participante activo en foros y conferencias internacionales sobre cambio climático y energías limpias, contribuyendo y aprendiendo de las mejores prácticas globales. Creo que todos estos planteamientos son factibles. Me baso en la experiencia, en la espertiz de la primera mujer presidenta de México, y en su compromiso, manifiesto en su campaña, que seguramente quedará manifiesto en el Plan Nacional de Gobierno 2024-2030, a favor de la transición hacia las energías limpias.
Su gobierno puede revertir el retraso en el desarrollo de energías renovables mediante una combinación de políticas favorables, desarrollo de infraestructura, apoyo a la investigación y educación pública, además de diversificar las operaciones de Pemex y fomentar la explotación sostenible del litio y la producción de hidrógeno verde. La cooperación internacional y el cumplimiento de la Agenda 2030 serán clave en este proceso.
Que así sea por el bien del país y en sumatoria al esfuerzo mundial por enfrentar los retos que devienen del cambio climático cuya capacidad destructiva está a la vista. Acapulco es un ejemplo de ello. La afectación a la producción de alimentos provocará hambruna, carestía y más pobreza, pero también generará más tensiones geopolíticas acompañadas de eventos bélicos y de una incontrolable migración acompañada de esas tensiones mundiales. Tomenos conciencia de ello. Ya es tiempo.