Bajos sueldos, la realidad de los jóvenes mexicanos

El Inegi reportó que el sueldo promedio en jóvenes fue de 33.8 pesos por hora trabajada; 33.5 en el caso de los hombres y 34.2 en el de las mujeres. En cuanto a la remuneración mensual, el 46.8 % recibió hasta un salario mínimo; 33.6 %, más de uno y hasta dos y 7.2 %, más de dos salarios mínimos.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) ha revelado datos cruciales sobre los ingresos de los jóvenes mexicanos, en un informe realizado con motivo del Día Internacional de la Juventud. Estos datos, basados en la información del primer trimestre de 2024 de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), muestran un panorama económico preocupante para la juventud del país, marcada por salarios bajos y una creciente incertidumbre económica.

En México, existen aproximadamente 31 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años, de los cuales 16.7 millones (54.1%) forman parte de la Población Económicamente Activa (PEA). De este grupo, 15.9 millones (95.2%) se encuentran ocupados, mientras que 810 mil (4.8%) están desocupados.

El informe del Inegi destaca que entre los jóvenes ocupados, el 60.3% son hombres y el 39.7% son mujeres. El ingreso promedio para este segmento de la población es de 33.8 pesos por hora trabajada. Sin embargo, al desglosar por género, se observa una ligera diferencia: los hombres ganan en promedio 33.5 pesos por hora, mientras que las mujeres perciben 34.2 pesos por hora.

Distribución de ingresos

El Inegi también reporta que, en términos de remuneración mensual para los jóvenes subordinados y remunerados, el 46.8% recibe hasta un salario mínimo; el 33.6% gana más de un salario mínimo y hasta dos; el 7.2% percibe más de dos salarios mínimos; y para el 12.4% no se dispone de información suficiente.

En cuanto a prestaciones, 48.1 % de las personas jóvenes que trabajaron de manera subordinada y remunerada tuvo acceso a servicios de salud, 59.3% contó con vacaciones y aguinaldo u otras prestaciones y 48.5 % recibió un contrato por escrito.
Estos datos revelan un panorama económico complicado para los jóvenes mexicanos, quienes a pesar de ser digitalmente nativos y contar con un nivel de educación superior al de generaciones anteriores, enfrentan múltiples desafíos que amenazan su estabilidad económica.

Contar con inglés avanzado o capacidades gerenciales permite alcanzar salarios hasta un 32% más altos que trayectorias laborales similares y 90% de los trabajos demanda ya habilidades digitales, aún en trabajos operativos u oficios. Las habilidades socioemocionales y personales son fundamentales para acceder a mejores empleos: la confianza, comunicación verbal y perseverancia son las más frecuentes.

Salarios promedio

Ingresos por jornada laboral de 8 horas
Hombres: 268 pesos diarios
1,608 pesos por una semana/ 6 mil 432 pesos por mes completo.
Mujeres: 273.06 pesos diarios
1,641.6 pesos por una semana/ 6 mil 566.4 pesos por mes completo.

Desafíos

Deuda estudiantil

Uno de los problemas más apremiante es la deuda estudiantil. Los elevados costos de la educación superior han obligado a muchos jóvenes a endeudarse significativamente, lo que limita sus opciones financieras tanto a corto como a largo plazo. Esta deuda se convierte en una carga que los jóvenes deben gestionar en un mercado laboral cada vez más incierto.

Inestabilidad laboral

El mercado laboral en México ha sido transformado por la economía gig y la automatización, generando una creciente inestabilidad laboral. Los empleos estables y bien remunerados son cada vez más difíciles de encontrar, lo que añade una capa adicional de incertidumbre para los jóvenes que buscan asegurar su futuro financiero.

Costo de vida elevado

El aumento constante en los precios de la vivienda, la alimentación y otros bienes y servicios básicos ha erosionado significativamente el poder adquisitivo de los jóvenes. Esta situación dificulta la posibilidad de ahorrar, invertir o incluso formar un patrimonio, lo que agrava su situación económica.

Buscan soluciones creativas

Ante este panorama de desafíos, los jóvenes mexicanos están buscando soluciones creativas y proactivas para mejorar su situación económica y asegurar su futuro financiero. Algunas de las estrategias más comunes incluyen: educación financiera, emprendimiento, ahorro e inversión.

Cada vez más jóvenes buscan información y herramientas para mejorar sus conocimientos financieros. A través de la educación financiera, esperan tomar decisiones más informadas que les permitan gestionar mejor sus ingresos, ahorrar, y planificar su futuro económico.

El emprendimiento se ha convertido en una opción atractiva para muchos jóvenes que buscan tener mayor control sobre su futuro financiero. Al crear sus propias empresas, estos jóvenes no solo buscan generar ingresos, sino también diversificar sus fuentes de ingresos y reducir la dependencia de empleos tradicionales que pueden ser inestables.

A pesar de los bajos ingresos y los altos costos de vida, muchos jóvenes están haciendo esfuerzos por ahorrar e invertir una parte de sus ingresos. Aunque las cantidades puedan ser modestas, estos esfuerzos reflejan una intención de construir un colchón financiero que les brinde mayor seguridad en el futuro.