Donald Trump sabe que perdió el primer debate contra Kamala Harris y teme volver a enfrentarse a la candidata demócrata, pero se niega a reconocerlo, como no reconoce que perdió las elecciones en 2020.
En una entrevista este miércoles con su cadena favorita, FOX News, el republicano dijo tener ahora «menos disposición» a debatir de nuevo, a pesar de que él mismo había propuesto otros dos cara a cara con Harris, uno de ellos en la cadena ultraconservadora.
«Tengo menos disposición a hacerlo, pero tuvimos una gran noche. Ganamos el debate», afirmó el republicano, pese a que todos los analistas y encuestadoras señalan lo contrario.
Según una encuesta de la CNN, fue Harris la que se impuso en el debate, con 26 puntos de ventaja sobre Trump. Se trata de una victoria rotunda casi similar a la que Trump tuvo en el debate de junio con Biden, de 34 puntos, y que forzó al presidente a tirar la toalla y ceder la candidatura a Harris.
«A Harris le pasaron las preguntas por adelantado»
Trump aprovechó la entrevista que le hizo Sean Hannity, una de las estrellas de la ultraderecha mediática estadounidense, para criticar a los moderadores de anoche y llamó a la cadena ABC «la organización de noticias más deshonesta de la historia».
Recurriendo a su habitual retórica agresiva y a las calumnias, Trump dijo que ABC es «el peor canal en términos de imparcialidad», insultó a uno de sus periodistas y aseguró que Harris «obtuvo las preguntas por adelantado» gracias a sus contactos.
Los haitianos “comegatos” y la risa de Harris
En su primera entrevista tras el debate, Trump no volvió a insistir en el bulo de que los los migrantes haitianos roban y se comen mascotas —”se comen los perros y los gatos”— en el estado de Ohio, dada las burlas en las redes y las imágenes repetidas de Harris riéndose abiertamente de él.
Pero el magnate neoyorquino, cuyo comportamiento megalómano le impide reconocer una derrota, insistió en que salió ganador.
«Me lo pasé bien. Creo que fue nuestro mejor debate de todos los tiempos. Eran tres contra uno», afirmó quejándose de los moderadores de ABC News, los periodistas David Muir y Linsey Davis, quienes desmintieron algunas de sus falacias más graves.
Entre ellas la de que en alguno de los estados gobernados por demócratas se había intentado implementar una ley para que se pueda abortar con más de ocho meses de embarazo o matar a los bebés después de nacer.
A menos de ocho semanas para las elecciones del 5 de noviembre, Trump volvió a repetir bulos recurrentes como la asociación entre «inmigrantes ilegales» y violencia, y repitió las cifras infundadas de 20 millones de inmigrantes indocumentados supuestamente «llegados de prisiones y manicomios extranjeros» al país para prometer de nuevo una deportación masiva si gana las elecciones.
No es habitual que los candidatos vayan a la sala de prensa después de un debate y esto, en opinión de la congresista demócrata Verónica Escobar, es señal de debilidad.
«Él estaba aquí desesperado, necesitando atención. Esta no es una persona que nos va a dar el liderazgo con dignidad a nuestro país», apuntó.
“Taylor pagará un precio en el mercado”
Para acabar de redondear la noche a favor de Harris, la demócrata recibió el respaldo electoral de Taylor Swift, la mayor estrella pop estadounidense del momento, un apoyo que no ha sentado bien a Trump, quien dijo que la artista probablemente «pagará un precio en el mercado» por ello.
En su cuenta de Instagram, donde tiene 283 millones de seguidores, Swift posó con una foto de su gato Benjamin y firmó su publicación como «señora soltera con gatos», una referencia al compañero de fórmula de Trump, J.D. Vance, quien criticó a Harris y a las mujeres sin hijos llamándolas de esa manera.
En ese post, Swift comenzó contando que había visto el debate y que decidió anunciar que votaría por Harris debido a que ella lucha por derechos y causas que, en su opinión, necesitan «una guerrera que las defienda».
«Creo que es una líder de mano firme y talentosa y que podemos lograr mucho más en este país si nos guía la calma y no el caos. Me sentí muy alentada e impresionada por su elección de compañero de fórmula @timwalz, quien ha estado defendiendo los derechos LGBTQ+, la fecundación in vitro y el derecho de la mujer sobre su propio cuerpo durante décadas», afirmó.
Debate entre Walz y Vance
Aunque no haya más debates presidenciales, falta aún otra cita en el calendario: se trata del debate del próximo 1 de octubre en Nueva York entre el candidato demócrata a vicepresidente, el gobernador de Minnesota, Tim Walz; y su rival republicano, el senador por Ohio J.D. Vance.
Las expectativas son altas dado que Walz ha sorprendido como un buen orador mientras que Vance ha protagonizado varias meteduras de pata desde que Trump lo nombró su ‘número dos’.