María Cristina Gómez Zúñiga, madre de Alejandra y abuela de María José, ambas originarias de Tlajomulco, encontradas sin vida este fin de semana en el estado de Colima aseguró que no le desea mal a la persona que les arrebató la vida, pero espera tenga todo el peso de la justicia.
«Yo no le deseo el mal al muchacho ni a su familia, pero la ley lo va a castigar y lo tiene que castigar no se tiene que quedar el afuera porque puede quitarle esta vida más personas, no merecemos pasar nadie por esto, no son nadie para quitar la vida a las personas», dijo
Alejandra viajó a Colima para que el papá de la niña la conociera y se hiciera responsable de la menor, salió de Tlajomulco el viernes 1 de noviembre alrededor de las 16:00 horas y no se volvió a saber de ella.
«La esperaba el domingo en la tarde, no llegó dije bueno va a llegar para mañana para irse a trabajar porque a veces así le hacía, llegaba a la hora para irse a trabajar, pero ya me empecé a preocupar cuando ya no llegó», relató.
El último contacto que tuvieron con Alejandra fue un video de cinco segundos que les envió por WhatsApp en donde les decía que ya había llegado a Colima. En ese video se alcanzaba a ver la niña en sus brazos y calles de aquel estado, por las cuales pudieron saber su último paradero
Alejandra le envió un audio a una amiga donde le decía que se iba a reunir con el papá de la menor y estaba preocupada que algo le pudiera pasar
«En ese audio le dice a una amiga voy a ir a llevarle la niña dijo voy a ir con el papá de mi niña, pero no creas tengo miedo, pero él quiere conocer a la niña», dijo.
Ella iba constantemente a Colima donde conoció al papá de su hija, en una fiesta, sin embargo, la familia de Alejandra no había visto nunca al hombre. Fue a través de redes sociales que pudieron obtener una fotografía de él
Alejandra estuvo esperando mucho tiempo quedar embarazada y finalmente lo había logrado con la pequeña María José, estaba muy feliz; recientemente acababa de bautizar a su hija. La niña era muy querida por la familia, a los abuelitos incluso los llamaba papás. Hoy la muerte de ambas deja un dolor imborrable para ellos
«Me entristece, yo no sé cómo voy a vivir no sé, recordándolas en cada rincón de mi casa haciendo sus travesuras, ya me decía abuela decía gracias le decía abuelo a su abuelo y últimamente le decía papá es un dolor muy grande muy grande que no le deseo a nadie», dijo.
Recuerdan a Alejandra como buena persona
Alejandra Rivas Gómez era muy querida por su familia amigos y conocidos, fue descrita como una mujer de gran corazón
«Alegre buena gente muy sociable muchísimas amistades, era muy querida por mucha gente, en una ocasión con varios de sus amigos compañeros y familiares hizo una recolecta de comida para llevarles», recordó.
Acababa de terminar su prepa y estaba esperando poder juntar dinero para obtener su certificado, un sueño que ella no pudo cumplir pero su mamá lo hará posible. Quería estudiar una carrera para superarse y sacar adelante a su hija
«Ella me decía mami yo no me veo así nada más ahí yo quiero salir adelante yo quiero ser alguien ya estoy grande pero puedo lograrlo todavía tengo a mi hija y por ella y por ustedes voy a seguir estudiando y no hallaba estaba viendo qué carrera y qué estudiar le dije mi hija ya no pudiste sacar tu certificado, pero yo te prometo que lo voy a sacar y voy a ir por él y aquí lo vas a tener en tu casa te truncaron tu vida tus sueños pero voy a traer tu certificado y aquí te lo voy a tener te lo prometo», aseguró.
Le gustaba cocinar, era uno de sus gustos favoritos. Su familia acababa de poner una carnicería en la que Alejandra iba a trabajar. El lugar apenas lo iban a abrir pero fue cuando desaparecieron… Al lugar le van a poner el nombre de su hija y su nieta.