Los bomberos en Los Ángeles intensificaron sus esfuerzos el domingo para controlar dos incendios forestales que arden desde hace seis días, aprovechando una tregua en las condiciones meteorológicas antes del regreso de los fuertes vientos que podrían avivar las llamas. El gobernador de California, Gavin Newsom, calificó el desastre como uno de los más devastadores en la historia de Estados Unidos.
Hasta el momento, 24 personas han perdido la vida y más de 100 mil han sido evacuadas mientras los incendios han destruido alrededor de 12 mil estructuras, dejando barrios completos reducidos a cenizas. Las autoridades continúan trabajando a contrarreloj para evitar que el desastre empeore con el pronóstico de condiciones adversas.