Una mujer de Las Vegas con doble nacionalidad, estadounidense y mexicana, es acusada de 21 cargos federales en Estados Unidos por su participación en una serie de estafas cometidas en ambos países, en contra de víctimas, todos ellos hombres a quienes contactaba a través de aplicaciones de citas.
La mujer, de 43 años de edad, identificada como Aurora Phelps, está acusada de utilizar las citas online para atraer a hombres mayores, drogarlos y luego obtener acceso a sus cuentas bancarias, tarjetas de crédito, seguridad social e incluso a sus acciones.
El FBI la describe como una estafadora «siniestra» y afirma que sus acciones han dejado un rastro de víctimas, incluyendo tres de cuatro de sus presuntas víctimas muertas, aunque formalmente sólo está acusada por la muerte de uno de ellos.
¿Quiénes son las víctimas de Aurora Phelps?
Se trata de un caso que involucra a un anciano de Nevada que fue encontrado muerto en una habitación de hotel en la Ciudad de México después de que Phelps supuestamente lo drogara con medicamentos, tras lo cual realizó compras con sus tarjetas y después lo llevó a través de la frontera en una silla de ruedas hasta la Ciudad de México, donde fue encontrado muerto en una habitación de hotel. Se desconoce cómo logró hacerlo viajar tantos kilómetros.
Posteriormente, Phelps se encontró con un hombre en Guadalajara, Jalisco, en mayo de 2022, quien fue encontrado muerto en el piso de su baño, en su propio domicilio. Días después, Phelps intentó utilizar sus cuentas financieras para realizar compras, incluida la compra de una moneda de oro con envío hasta su propio domicilio, en Estados Unidos.
Una de sus presuntas víctimas sobrevivió y salió de un coma de cinco días después de que Phelps supuestamente le administrara grandes cantidades de sedantes. Durante ese tiempo, la mujer supuestamente le robó su iPhone, iPads, licencia de conducir y tarjetas bancarias, además de que vendió sus acciones de Apple.
Estados Unidos busca su extradición
Phelps se encuentra actualmente detenida en México y los fiscales estadounidenses están trabajando para extraditarla a Estados Unidos para que enfrente cargos que podrían conllevar una pena de cadena perpetua.
Le imputan siete cargos de fraude electrónico, tres cargos de fraude postal, seis cargos de fraude bancario, tres cargos de robo de identidad, un cargo de secuestro y un cargo de secuestro con resultado de muerte, según la acusación federal. El FBI cree que puede haber más víctimas y está pidiendo al público que se presente con cualquier información que pueda ayudar en la investigación.
«Técnicamente, se trata de una estafa romántica, pero es una estafa con esteroides. Nunca hemos visto una estafa como esta en la historia reciente que sea tan nefasta y siniestra», señaló Spencer Evans, agente especial a cargo de la división de Las Vegas del FBI, según declaraciones recogidas por The Associated Press.