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Adriana Silvia Armella era el nombre de una maestra argentina que falleció luego de haberse desvanecido en pleno salón ante un grupo de padres de familia con los que había sostenido una tensa reunión, por lo que, como era de esperarse, este caso ha conmocionado a toda la sociedad del país sudamericano, además, ya le está dando la vuelta al mundo debido a que quedó exhibido el alto nivel de estrés al que están sometidos los docentes, por ello, en esta nota te diremos cuáles son las principales claves de este caso.
De acuerdo con los reportes de distintos medios locales, estos hechos ocurrieron en las instalaciones de la Escuela Normal “Juan Ignacio Gorriti” de San Salvador Jujuy, ciudad ubicada al norte del territorio argentino y fue el pasado jueves 20 de marzo cuando Adriana Silvia Armella, vicedirectora del plantel, sostuvo una reunión con un grupo de padres de familia para discutir distintas problemáticas relacionadas con temas escolares, no obstante, trascendió que en dicha junta se registró un alto nivel de tensión en el ambiente debido a los enérgicos reclamos de los padres de los alumnos.
Otros docentes que participaron en la reunión señalaron que, en medio de las discusiones, la maestra se desvaneció y terminó tirada sobre el suelo, por lo que de inmediato personal de la propia escuela, así como algunos padres de familia se encargaron de trasladarla a un hospital cercano donde minutos más tarde se confirmó su deceso y de acuerdo con los reportes médicos oficiales, la docente perdió la vida debido a que sufrió un accidente cerebrovascular, el cual, pudo haberse propiciado debido al alto nivel de estrés al que se encontraba sometida.
“¿La escuela vale nuestras vidas?”, la fuerte reflexión del gremio magisterial argentino
Tras el fallecimiento de la maestra Adriana Silva Armella, el Colectivo Docente de la Escuela Normal “Juan Ignacio Gorroti”- Nivel Primario emitió un documento en el que lamentaron el fallecimiento de su compañera de profesión, además, aprovecharon para poner en evidencia las implicaciones físicas y mentales que tiene la docencia por lo que pidieron empatía a alumnos y padres de familia, además, también exigieron a las autoridades oficiales de educación implementar las medidas necesarias para salvaguardar la integridad de los miembros del gremio.
“¿La escuela vale nuestras vidas?” fue la frase más impactante del comunicado, el cual, finalizó haciendo un sutil llamado a todos los profesores a mantenerse unidos para exigir el respeto a sus derechos para que no tengan que morir más docentes en las aulas.
La maestra Adriana Silva Armella tenía tan solo 56 años de edad, se sabe que estaba casada y que tenía cuatro hijos, además, su familia informó que los restos de la docente fueron inhumados en un cementerio de la ciudad de San Salvador en Jujuy.
