Ucrania y Rusia llevaron a cabo este sábado un nuevo intercambio de prisioneros de guerra, liberando a más de 500 combatientes en uno de los mayores canjes desde el inicio del conflicto a gran escala hace más de tres años.
Las autoridades rusas informaron que sus soldados liberados fueron trasladados primero a Bielorrusia, estrecho aliado de Moscú, donde permanecerán temporalmente antes de ser repatriados. Aunque no se han divulgado cifras exactas por parte de Kiev, el gobierno ucraniano confirmó que decenas de sus militares regresaron a casa.
Este intercambio subraya la continuidad de las negociaciones humanitarias entre ambos países, pese a la persistencia de los combates en el frente.