Decenas de miles de personas salieron a las calles en distintas ciudades de Estados Unidos —incluidas Nueva York, Atlanta y Los Ángeles— para manifestarse contra el presidente Donald Trump, en el marco del movimiento “No Kings Day”.
La jornada de protesta, sin embargo, se vio ensombrecida por el asesinato de una legisladora demócrata en Minnesota, lo que llevó a cancelar todas las marchas previstas en ese estado. El gobernador Tim Walz calificó el hecho como un “asesinato por motivos políticos”.