Autoridades detuvieron a un hombre de 57 años, identificado como director de una empresa de seguridad y predicador, señalado como el principal sospechoso del asesinato de la legisladora demócrata de Minnesota y su esposo.
De acuerdo con el gobernador del estado, Mike Walz, el ataque fue perpetrado por “motivos políticos”, lo que ha encendido las alarmas sobre la creciente polarización y violencia en el entorno político estadounidense.