Una imagen cada vez más común en calles de la ciudad: pares de tenis colgados en el cableado eléctrico. Mientras algunos lo consideran una forma de arte urbano o una supuesta tradición, lo cierto es que esta práctica representa una carga innecesaria para la infraestructura y afecta la imagen urbana.
Esta escena fue captada en la Prolongación de Paseo Usumacinta, esquina con Prolongación de 27 de Febrero, en Tabasco 2000.
Las autoridades han advertido que colgar objetos en los cables puede generar riesgos eléctricos, interrupciones en el servicio y un deterioro visual del entorno.