Un estandarte feroz
María Elodia Zurita Argáez
En algunos textos lo llaman el primer héroe del pueblo mexicano y también lo llaman el último rey del México antiguo ¡Voy, voy! Como diría un personaje de película del cine de oro; las cosas como son: Cuauhtémoc fue el último rey sí, pero de los mexicas y luchó sí, pero por su pueblo; es decir el pueblo mexica; por que en términos reales no existía una nación llamada México; quienes poblaban este territorio, era una serie de pueblos separados no solo por las distancias o por las lenguas, también por distintas manifestaciones culturales, tradiciones, etc. Además, no olvidemos que muchos de esos pueblos estaban sometidos y eran obligados a pagar tributo a los mexicas.
Cuauhtémoc fue elegido rey o Tlatoani de los aztecas tras la muerte de Cuitláhuac. Al tomar el cargo tenía ante sí una gran amenaza latente: en su panorama se esperaba que los españoles regresarían, así que envió embajadores a todos los pueblos con la solicitud de convertirse en sus aliados, ofreciendo disminuir sus contribuciones e incluso eliminarlas. Además, se ocupó en organizar el ejército mexica. Los españoles, como estaba previsto, regresaron un año después y en esta nueva incursión traían -según se tiene estimado- a más de cien mil aliados nativos; siendo la mayoría tlaxcaltecas; los españoles, comandados por Hernán Cortés, lo capturaron en Tlatelolco.
Cuauhtémoc fue capturado mientras huía en una canoa de Tenochtitlan; junto a él iban su familia y sus guerreros más cercanos; Cuauhtémoc, a petición propia, fue llevado ante «Malinche» como llamaban a Cortés los mexicas, pidiéndole que lo matara. Esto ha sido interpretado como que prefería morir ante el deshonor de no haber podido defender su ciudad y a sus vasallos; sin embargo, se sabe que para los guerreros mexicas, los capturados por el enemigo debían aceptar morir en sacrificio a los dioses.
Los españoles, fieles a sus anhelos de obtener oro, sometieron al tlatoani al tormento; como consecuencia, Cuauhtémoc quedó tullido y cojeó; le habían quemado los pies y las manos; su cautiverio duró más dos años; fue utilizado como estandarte de la derrota de los mexicas. Cuauhtémoc falleció en Tabasco; Cortés lo juzgó culpable de intentar una rebelión, por lo que lo mandó ahorcar. Los españoles intentaron convertirlo al cristianismo, pero esto sucedió solo cuando le dieron muerte.
El nombre de Cuauhtémoc significa ‘el águila que desciende’; quizás en su nombre traía el designio de la caída del imperio azteca; sin embargo, para el pueblo mexicano, Cuauhtémoc representa el ideal del espíritu nacional; quien lucha incansablemente y entrega su vida por su pueblo; en caso de rendirse nunca entregará los tesoros propiedad de su nación, aunque esto le cueste la vida.
Bernal Díaz del Castillo describe a Cuauhtémoc de esta forma: —de muy gentil disposición, así de cuerpo como de facciones, y la cara algo larga y alegre y los ojos más parecían que cuando miraba que eran con gravedad y halagüeños, y no había falta en ellos… y el color tiraba más a blanco que al color y matiz de esos otros indios morenos. Era resuelto y valiente, lo que lo llevó a obtener varias victorias en el terreno militar. Además, se había convertido en un estandarte de la más feroz oposición a los españoles.
¡Que esta sea una semana productiva para todos!