• Ante músicos, estudiantes y público en general, el reconocido percusionista festeja que esta versión del Ceiba recupere su parte educativa y formadora de talentos musicales.
La alegría del XVIII Festival Cultural Ceiba dio comienzo en la ‘Casa de la Trova’ con un paseo musical que llevó a los asistentes por África, Persia, New Orleans, Veracruz y Huimanguillo, de la mano, profundidad, picardía y ritmo del músico Javier Cabrera Jasso, percusionista que impartió una clase magistral en lo que constituye la recuperación educadora y formadora de nuevos talentos de esta importante fiesta del Pueblo.
“Fue una bendición que me hayan invitado, para esta charla que acababa de pasar y para la presentación de mi libro. No todo es diversión, fiesta, gozo y placer, sino también despertar en los jóvenes esa chispa de la investigación, de trabajo profundo, de saber, de poderse explicar las cosas, no copiar en Wikipedia, no basarse en la Inteligencia Artificial, sino en la búsqueda personal de identidad a través de la investigación”, afirmó.
Durante poco más de una hora, el también antropólogo decano de la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana, viajó con sus oyentes atentos siguiendo lo que llamó la primera célula musical de origen africano, y cómo está se transformó gracias a la migración humana, a través de los barcos repletos de esclavos o de tropas de soldados, en cantos espirituales de negros, el jazz de New Orleans, el swing sobre el río Mississipi, la milonga en el Uruguay, la rumba en Haití y Cuba o el jarabe mexicano.
“Yo concibo la música no como un fin sino como un medio para ser mejor persona. Y a través de la historia de la música y de conocer culturas, sostengo que hay un ADN en su instrumentalización, en su forma. El mayor mérito musical no viene de los ricos sino de la marginalidad, la innovación musical se da de abajo hacia arriba, de afuera hacia adentro. Así me explico la música, en su contexto”, sostuvo en su clase magistral.
Acompañado de tres congas, ilustró cada uno de los ritmos en que fue evolucionando esa célula musical migrante. Bien pronto preguntó entre el auditorio si había músicos, para que subieran al escenario y lo acompañaran en las algunas ejecuciones musicales. Cinco manos se alzaron y solo tres tuvieron la fortuna de tocar con el reconocido percusionista tabasqueño mientras explicaba los compases.
“Hoy empieza una fiesta del pueblo tabasqueño y hago una invitación para que todo el mundo participe, todos los eventos son gratuitos, entonces no hay pretexto, vengan a los que puedan, muchas veces no se puede estar en todo, pero aprovechen la fiesta, porque es para el pueblo”, exhortó.
Al final, el público mostró su satisfacción y agradeció la cátedra. Don Audomaro Lastra reconoció que “jamás había escuchado una clase de música y menos con música de tambor. Me pareció magnífica. Y un acierto que la Secretaría de Cultura difunda la música”.
El estudiante del Centro de Estudios e Investigación de las Bellas Artes (CEIBA), Neftalí Marí agradeció que esta conferencia profundice en conocimientos musicales que no se tocan tanto comúnmente en las carreras. “Me parece bien que se dé la oportunidad a los músicos tabasqueños, como Javier Cabrera Jasso. Yo invito a todos a que se den la oportunidad de venir y, a partir de ahí, emitan una opinión”, expresó.
El músico cubano, también percusionista, Danny Zamora, reconoció el vasto conocimiento de Cabrera Jasso como percusionista. “En esta master class te explica muchas cosas interesantes que nosotros no conocíamos. Lo recomiendo; recomiendo el Festival Ceiba”.