La guerra de las marcas petroleras

La guerra de las gasolineras

«A partir del 1 de enero de 2016 se abre el mercado de la distribución y expendio al público de gasolinas y diésel a toda persona interesada, de forma libre, es decir, sin estar condicionada a la celebración de contratos de franquicia y suministro con Pemex o con cualquier otra empresa productiva del Estado, y sujeta al cumplimiento de la normativa nacional aplicable y de estándares técnicos internacionales», señala la Norma Oficial Mexicana de Emergencia NOM-EM-001-ASEA-2015 publicada en el Diario Oficial de la Federación en diciembre del año pasado…

Con la inminente entrada de las grandes empresas petroleras de nivel mundial al mercado mexicano de los hidrocarburos, uno de los grandes temas que se desprenden de la Reforma Energética, corresponde sin duda, a las gasolineras. Desde que tuvo lugar la expropiación petrolera en 1938, una sola marca comercial ha dominado el mercado del combustible para automotores en nuestro país: Pemex. Esto ha cambiado. Ahora los empresarios gasolineros mexicanos y extranjeros tienen la opción de importar gasolina y diésel de otros países y el precio por litro quedará libre y cambiará de acuerdo a los precios internacionales del petróleo crudo a partir del 1º. De enero del 2017.

Es un gran negocio el que está en juego. Actualmente existen 10,800 unidades de negocios en el ramo, distribuidas por todo el territorio nacional y controladas por grupos y particulares bajo el esquema de franquicia de Pemex, generando alrededor de 400,00 empleos directos e indirectos, como lo informa la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo). Se estima que cerca de 5,200 gasolineras están en manos de pequeños empresarios que poseen una estación de servicio, en tanto 2,500 más son empresas familiares que cuentan con dos estaciones en promedio, los que representa casi un 75% de negocios del sector que funcionan bajo el esquema de MiPymes (Micro, pequeñas y medianas empresas). El resto (3,100) son administradas por grupos corporativos.

El negocio de las gasolineras genera ganancias por cerca de 730 mil millones de pesos anuales como sector y considera inversiones en la red por más de 200 mil millones de pesos para construir, así como modernizar estaciones de servicio. Se espera que esta inversión se incremente considerablemente en el corto plazo hasta alcanzar los 400 mil millones de pesos para la renovación de los puntos de ventas actuales y para la construcción de nuevas estaciones de servicio, lo que es permitirá presentar una nueva cara al consumidor, lejos ya de la sombra de la imagen de Pemex, con lo que dejaremos de ver las ya clásicas gasolineras pintadas en verde para ver los nuevos colores de la competencia.

La guerra está por iniciar

En este nuevo escenario comercial, el esquema de guerra incluye como elemento de competencia la formación de alianzas empresariales nacionales, constituidas por diversos actores del sector cuya capacidad de competencia se ve disminuida de manera individual; sin embargo, bajo la lógica coloquial de “la unión hace la fuerza”, se agruparán para presentar un frente competitivo que presente batalla comercial a los inversionistas extranjeros, así como para tratar de frenar el avance del grupo G500, que congrega a más de mil gasolineras. Entre los principales grupos gasolineros mexicanos que han adoptado este esquema en una gran alianza con Pemex se encuentran Hidrosina, Corpogas, Lodemo, Esges, Enerkom, Octan Fuel, Gasored y Cargo, que en conjunto controlan el diez por ciento del total de establecimientos en el país, con 1,265 estaciones de servicio. Veamos quienes son algunos de estos actores.

Grupo Hidrosina. Fue fundado en octubre de 1992 con inversión 100% mexicana. Inició con 30 estaciones de servicio en la Ciudad de México y actualmente controla más de 180. CorpoGas. Surge en 1982 en la ciudad de México. Del 2003 al 2008 PEMEX les otorgó el reconocimiento como el grupo con más ventas de combustible a nivel nacional. Lodemo. Grupo de gasolineras fincadas en el sureste del país, principalmente en Yucatán y Quintana Roo. Aportan 29 estaciones a la alianza. GES. El Grupo Energético del Sureste controla aproximadamente 40 estaciones de servicio en el sureste mexicano, incluyendo Tabasco. Enerkom. Ubicado también en el sureste, el grupo con sede en Mérida, aporta 8 estaciones de servicio a la alianza. Gasored. Hacia el centro-norte del país, en los estados de San Luis Potosí y Guanajuato, se localiza esta empresa que administra 23 estaciones de servicio.
Al margen de esta gran alianza gasolinera, las conocidas cadenas de tiendas de conveniencia 7Eleven y Oxxo, han aprovechado su amplia presencia en el territorio nacional para operar también negocios gasolineros, agregando este servicio a sus actividades comerciales. En el caso de Oxxo, cuenta con 200 gasolineras, distribuidas en las ciudades de Monterrey y su área metropolitana, Saltillo, Torreón, León, Aguascalientes, San Luis Potosí, Querétaro, Cancún y Guadalajara.

Todas estas empresas operan ya en nuestro país. La inversión extranjera en el ramo de las estaciones de servicio vendrá a partir del próximo 2017 en la forma de las grandes cadenas Chevron, Circle K, BP, Exxon, Go-Mart, Mobil, Philips 66, Shell, Texaco. A estas empresas de Norteamérica y Europa, se suma Puma Energy, que inició operaciones en América Central y tiene oficinas globales en Ginebra, Suiza. Actualmente tiene mil 247 estaciones en Puerto Rico, Guatemala, Colombia, Paraguay y Honduras, donde también cuenta con ocho centros de abastecimiento de turbosina para aeropuertos de la región.

Autor: Salvador Octavio Aguilar Martínez

*Con información de Forbes, Merca 2.0, CNN Expansión, El Financiero y los portales de las empresas mencionadas.

Acerca de Jorge Cupido

Te puede interesar

Danielle Smith pide expulsar a México del T-MEC

México se ha convertido en “una puerta trasera para los automóviles, autopartes y otros productos …