Nayeli Micol Ortiz González compartió que a la edad de 13 años fue diagnosticada con leucemia y tratada en la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) de Pediatría del IMSS Jalisco, y hoy tiene 24 años, es madre y estudiante de la carrera de Derecho.
Detalló que en 2004 llegó a la UMAE de Pediatría del IMSS Jalisco, en donde fue diagnosticada con leucemia mieloblastica aguda M4 por el hematólogo del nosocomio, Roberto Francisco Garibaldi Covarrubias, quien luego de realizar estudios a su médula ósea, confirmó a sus padres que padecía este tipo de cáncer.
Mencionó que en ese momento inició su primer tratamiento de quimioterapia con una duración de dos años, que implicó tres meses de hospitalización debido a una complicación intestinal, dada su condición de salud.
Mi doctor siempre estuvo muy al pendiente de mí y siempre con actitud positiva, en ese primer tratamiento comencé con las reacciones que son pérdida de apetito, pérdida de cabello, nauseas, tuve una complicación en el intestino, el cual dio como resultado una fuerte peritonitis», explicó.
Dijo que a pesar de que la cirugía fue exitosa, las secuelas de dicha complicación no daban muchas esperanzas, «en cualquier momento podía fallecer, mis papás junto con el doctor Garibaldi nunca perdieron la fe a pesar de las bajas expectativas».
Comentó que tiempo después el médico tratante realizó un nuevo estudio de la médula ósea de ella, «y la sorpresa fue ver que la enfermedad de la leucemia parecía empezar a ceder, pero las secuelas de la peritonitis que presenté derivaron en una colostomía».
Duré un año con la colostomía, con riesgo de quedar de por vida con ella, estando con ésta tuve cuatro cirugías en total y mientras duré hospitalizada esos tres meses a causa de esa complicación me colocaron una sonda, durante mes y medio me alimentaron con la modalidad parenteral, de hecho llegué a pesar 26 kilos», dijo.
La joven expresó que tras dos años de tratamiento de quimioterapia continuó bajo vigilancia durante cinco años posteriores y en 2011 fue dada de alta por el servicio de Hematología al no presentarse ninguna recaída, en cuestión de la leucemia mioloblástica aguda.
Fui muy consentida por los doctores, siempre estuvieron al pendiente de que todo fuera bien, las enfermeras fueron muy dedicadas en su labor, mi familia nunca me dejó sola, los cuidados fueron extremos tanto en la limpieza como en la alimentación», destacó.
Subrayó que en la actualidad «soy mamá de una niña de tres años sin ninguna complicación y muy sana, sigo adelante con mis estudios, curso séptimo semestre de licenciatura en derecho».
Cada año mi familia y yo vamos al centro médico al área de hematología a compartir mi testimonio para que se den cuenta de que los milagros existen», resaltó.
Indicó que se considera afortunada «por haber contado y contar en la actualidad, con la atención médica del Seguro Social, a mí fue lo mejor que sucedió, gracias al personal que le ponen empeño a los pacientes y se esfuerzan porque salgan adelante».