Hablar de las lagunas de Villahermosa, así como su fauna y flora, es hablar de la identidad de la capital tabasqueña. El edén de México ha ganado su mote precisamente por esta característica que enamora al turista y a sus habitantes enorgullece.
En un día como cualquiera, es posible apreciar estas bellezas que aún y con la amenaza que representa el crecimiento de la mancha urbana, siguen siendo fuente de vida, hábitats que merecen ser conservados y protegidos, pues no sólo son un sello de la ciudad, sino también el pulmón que respira y da vida a una capital verde que está siendo sepultada por el concreto.
Tranquilidad y belleza en medio de la urbe de concreto
Ecosistemas que pocas ciudades pueden presumir, los hay en Villahermosa
Desafortunadamente la contaminación es uno de las amenazas más graves para la flora y la fauna
La naturaleza se impone y deslumbra en estos espacios naturales
Cualquiera puede disfrutar de la brisa y el paisaje
La conservación de estos sitios debe ser prioridad
Cada vez son menos las garzas blancas que se posan en estos cuerpos de agua