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Si buscabas nuevos motivos para odiar a Luisito Rey, el capítulo ocho de Luis Miguel: la serie te da un par más.
Los maltratos que el español daba a su familia fueron una constante, y la adolescencia de Mickey no fue una excepción.
Si ya antes había sugerido a un médico recetar efedrina a su hijo para que rindiera más en el trabajo, esta vez Luis Rey no presta atención a la recomendación de un foniatra para dar a Mickey un año de descanso, con el fin de no dañar sus cuerdas vocales. Sin importarle las consecuencias, Rey se lleva a LuisMi a dar una serie de shows.
Una noche, Luis Rey y su hermano Tito deciden que ha llegado el momento para que Luis Miguel, a sus 14 años (1984) pierda su virginidad con una trabajadora sexual llamada Mirna.
Tras ponerse de acuerdo, Luis Rey, Tito y Mirna ingresan a la habitación de El Sol, quien luce sorprendido y temeroso. «Mira lo que te he traído Mickey, está aquí para que le hagas lo que quieras», le indica su padre.
«Con esto, ya seguro que te cambia la voz» agrega.
“Las mujeres son complicadas”, dice al día siguiente Luis Rey a su hijo, a manera de preámbulo para pedirle que le mienta a su madre y le diga que su supuesta tutora, Rita, tuvo que darle clases a altas horas de la noche porque su show terminó muy tarde.
A su regreso a casa, y con su madre en cama, Mickey obedece a su padre y le oculta así que Luis Rey le es infiel.
