Ante el inicio de la temporada vacacional de verano, la Secretaría de Salud exhorta a los padres de familia a estar más pendientes de sus hijos, a prevenir accidentes como caídas y lesiones, así como ahogamientos, envenenamientos o descargas eléctricas que ocurren principalmente en el hogar.
El responsable del Programa de Salud en la Infancia y la Adolescencia, Jesús Peralta Olvera, señaló que en este periodo los accidentes en niños y adolescentes se llegan incrementar hasta 20 por ciento, siendo el descuido de los padres de familia o tutores la principal causa, al dejarlos solos o no estar pendiente de ellos.
Indicó que si bien muchas familias aprovechan para salir de viaje con sus hijos, en la mayoría de los casos por la situación económica los niños se quedan en casa, ya sea solos, al cuidado de adultos mayores o incluso de sus hermanos más grandes, debido a que tienen que ir a trabajar.
Señaló que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), ocho de las 15 causas de muerte en el grupo de 15 a 29 años edad están relacionadas con lesiones en todas sus modalidades, como traumatismo por accidentes viales, suicidios, homicidios, ahogamientos, quemaduras, intoxicaciones y caídas.
Las caídas, traumatismos y lesiones son los que afectan principalmene a los menores de edad, seguidos de las quemaduras ya sea dentro de la cocina por caída de líquidos calientes, sartenes con aceite hirviendo, por jugar cerca de fogones o con basura que se está quemando afuera de las viviendas.
Peralta Olvera mencionó que otro de los incidentes frecuentes al interior de las viviendas es el envenenamiento por consumo accidental de líquidos de cocina, solventes o combustibles, además de las descargas eléctricas, debido a que los infantes por curiosidad meten objetos dentro de los contactos eléctricos.
En este contexto, también recomendó mantener vigilancia permanente cuando niñas y niños entren a una alberca, río o playa, para evitar consecuencias fatales; advirtió además que en algunos adolescentes que se quedan solos en casa se van con sus amigos a nadar a algún río o laguna, y es cuando se presentan los ahogamientos.
Por ello, Jesús Peralta consideró que los cursos de verano son una alternativa para los padres que por cuestiones laborales no pueden quedarse en casa a cuidar a sus hijos; actualmente instituciones de gobierno ofrecen estas opciones, las cuales además de mantenerlos ocupados con actividades deportivas, educativas o recreativas, les ayudan a desarrollar sus capacidades físicas e intelectuales.