El presidente Andrés Manuel López Obrador interrogado este viernes en su conferencia matutina sobre el desabasto de metotrexato para niños con cáncer, levantó una nueva polémica al señalar:
“Yo hago una reflexión sobre esto. Vamos a suponer que esté en un hospital una niña, un niño y, aceptando sin conceder, que no tiene el medicamento, ¿qué sociedad somos, si la enfermera, si el médico, si el director del hospital, si cualquier ciudadano no toma la decisión de comprar el medicamento para que no pierda la vida la niña o el niño? De todas maneras, hay que investigarlo y no tienen por qué faltar los medicamentos”.
La lectura dada en redes fue, evidentemente, que el Presidente estaba sugiriendo que el personal Médico debía pagar las medicinas en situaciones de urgencia.
El Presidente, previamente, había atribuido las críticas en el desabasto de estos medicamentos, al menos en parte, a las farmacéuticas que dejaron de adjudicarse millonarias licitaciones de medicamento. Se gastaban 90 mil millones de pesos en medicinas y aún así había desabasto, señaló.
La muerte de una menor en el Hospital Infantil de México mantuvo en la discusión pública el desabasto de medicamento, inicialmente negado, pero que al paso de los días mereció la intervención del secretario de Salud y los comentarios del propio Presidente.
Hay que investigar bien el asunto y se está haciendo, pero existen todos estos elementos que hay que analizarlos en su conjunto. No estoy diciendo que no pudo suceder esto, lo que estoy explicando es en el contexto en el que se están dando estas cosas”, refirió en torno a la niña muerta, fallecimiento que horas más tarde atribuiría salud a causas propias de su enfermedad y no a que haya dejado de tomar las dosis de metotrexato.
El Presidente comentó que en casos de urgencia es válido realizar viajes para conseguir las medicinas faltantes, lo que incluye viajes al extranjero, y fue en ese contexto en el que hizo preguntas retóricas sobre la posibilidad de que médicos o ciudadanos compraran los medicamentos faltantes, en la hipótesis de que un niño se quedara sin ellos en el sistema de salud.
López Obrador fue enfático, nuevamente, en señalar que hubo procesos de corrupción en la adquisición de medicamentos para el sector público y que eso ya no se tolerará.
Señaló que se robaban el dinero de las medicinas, había una gran corrupción; a pesar de que se compraban esos 90 mil millones de pesos en medicinas y en materiales de curación no había medicamentos en centros de salud ni en hospitales.