En medio de la pandemia y el confinamiento que se vive en el país por el COVID-19, el cuidado en casa de un recién nacido debe ser muy estricto para evitar contagios por este virus, por lo que no es recomendable recibir visitas en domicilio, debido a que los primeros días de vida de un bebé su sistema inmunológico aún está en desarrollo, advirtió la doctora Irma Muciño Ramírez, encargada de la Jefatura de Pediatría del Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Dr. Carlos Mac Gregor Sánchez Navarro”.
Recordó que la transmisión de SARS-CoV-2 a los recién nacidos ocurre a través de gotitas respiratorias después del nacimiento, cuando están expuestos a madres, otros cuidadores, visitantes o personal infectado, por lo que la mejor manera de que el bebé se mantenga saludables es evitar el contacto cercano con personas que están enfermas o que han tenido relación con pacientes infectados o casos sospechosos de infección por COVID-19.
En caso de que en el hogar haya una persona enferma de COVID, hay que mantener al bebé lejos y tomar todas las medidas de higiene difundidas ampliamente: lavado de manos frecuente con agua y jabón, limpiar y desinfectar con cloro objetos y superficies que se tocan con frecuencia y mantener en aislamiento al bebé, insistió, dentro de lo posible de otras personas, es decir, no recibir visitas, no sacarlo de la casa, en estos momentos de epidemia, sostuvo “la familia y amigos pueden conocer al bebé a través de video llamadas o fotografías”.
Estas medidas de higiene y protección deberán mantenerse si el bebé necesita ir revisión médica a los tres o siete días, para pruebas tan importantes como el tamiz neonatal y aplicación de vacunas.
Asimismo, enfatizó la lactancia, que es la alimentación más importante para el recién nacido, siempre que no haya ningún inconveniente por parte de la madre para amamantar al bebé.
“Si la madre piensa que ha sido expuesta y probablemente infectada, pero no tiene síntomas, debe considerar el uso de una mascarilla para alimentar y estar en contacto con el bebé”, mientras que las madres que han presentado síntomas o que han sido diagnosticadas y apartadas del neonato, se les recomienda que extraigan la leche, si es posible, ya que ésta puede ser alimentada al bebé por otro miembro de la familia que esté saludable.