Novedades de Tabasco El diario mas fuerte de Tabasco
Por: Laura Rosado
Instagram @laurarosado,vidabienestar
Y de repente llega el día que por algo que escuchaste, leíste, o te contaron, te das cuenta que tu alimentación está relacionada con algunos malestares o enfermedades que puedes estar sufriendo. Te das cuenta que realmente no eres consciente de todo lo te llevas a la boca en un día. Te invito a reflexionar en este tema: ¿De qué te alimentas cada día? ¿De comida procesada o de comida natural? ¿Cuentas calorías o cuentas nutrientes? Estas preguntas valen la pena ser respondidas, vamos a hacerlo ordenadamente:
El primer paso es este ejercicio:
Anotar durante 8 días todo lo que comas
-Ten una libreta y pluma a la mano. -Cada día anota todo lo que comes. -Tus tres comidas, escribe todo lo que incluyen. -Todo lo que te comas de snack o botanas. -Todo lo que comas o bebas entre comidas (incluida el agua y cantidad) -Incluir el sorbo de refresco que le robaste a tu hija. -La mordida que le diste al pan dulce de tu mamá. -El chicle que masticaste. -Lo que comes viendo la tele o leyendo.
-El café que compraste en la calle. *Anota TODO lo que comas o bebas. Literal TODO, ya sea un plato completo o solo una probada.
Cuando pase la semana de este ejercicio, vas a tomar tu libreta y vas a leer todo lo que hayas anotado durante estos días. Suena retador ¿verdad? Pero es un ejercicio buenísimo para que veas la realidad, la verdad contundente de lo que te llevas a la boca. Como muchas veces solemos estar viviendo en automático, no nos damos cuenta de nuestras acciones cotidianas con la comida, esta propuesta te hará hacer consciencia y ese es el primer paso para observar tus hábitos alimenticios, darte cuenta en que estás cometiendo errores de consumo, quizá demasiado procesada y quizá chatarra y cambiarlos por alimentos naturales, alimentos vivos que te hagan vivir en salud.
Entonces el segundo paso es la consciencia
Comenzamos hablando que la alimentación está relacionada con los malestares o enfermedades que puedas tener, entonces ahora te darás cuenta de tu comida cotidiana y en esta consciencia podrás tomar la decisión de hacer los cambios necesarios para emigrar a comer sanamente. Si te fijas, no dije, darte cuenta y ponerte a dieta, no, dije hacer cambios para llevar una alimentación sana. En esta consciencia ahora que hagas los cambios, obsérvate.
Tercer paso ¿Qué comer?
-Fruta (una a la vez, sin mezclarlas entre sí) -Verduras, todos las variedades y colores. -Hojas verdes (espinacas, acelga, col, kale, lechugas, arugula) -Proteína animal de buena calidad. -Que prepares en casa con ingredientes naturales todas las salsas y sopas. -Cereales integrales (avena, salvado, arroz) -Leguminosas (garbanzo, lentejas, frijol) -Grasas buenas (aguacate, semillas de girasol, aceite de oliva, almendras, nueces, pescados como salmón y sardina, aceitunas
Cuarto paso, la observación
Ya que empieces a comer más natural, consumas menos alimentos que vienen en empaques, obsérvate cómo te sientes, ¿qué vas a observar?
-¿Estás menos inflamado? -¿Ya no sientes acidez? -¿Tienes más energía? -¿Vas mejor al baño? -¿Te sientes más ligera?
Si ves, con estos alimentos puedes crear una gran variedad de platillos, ricos y nutritivos. Al dejar de contar calorías y contar mejor nutrientes, le estarás dando a tu cuerpo todo lo que necesita y eliminando todo lo que lo daña.
Continuaremos la siguiente semana…
“Que la comida sea tu alimento y tu alimento sea tu medicina” Hipócrates
Gracias por leerme
LAURA ROSADO/. LA VIDA ES HOY
