Le llueven las críticas a Gatell

Entre pancartas, gritos, insultos, e intercambio de descalificaciones donde se involucró el mismo Hugo López Gatell, la comparecencia en el Senado del subsecretario de Salud y del titular de la Cofepris, José Alonso Novelo, fue suspendida “por falta de garantías ” por parte del presidente de la comisión de Salud en la Cámara Alta, Miguel Angel Navarro.

“Muchas gracias, ya estuvo…”, lanzó un López Gatell con el rostro desencajado, molesto, ante la lluvia de adjetivos y cuestionamientos a su estrategia contra el Covid que le lanzaron sobre todo las senadoras del PAN, pero también las de Movimiento Ciudadano y del PRI.

A un costado quedó el cetro de madera que le entregó la senadora Lily Téllez quien se lo entregó y lo bautizó como “el pequeño Virrey de las camas vacías y los muertos en casa”.

“Con todo respeto a los invidentes, con todo respeto a las personas ciegas, empezando por mi propio padre, le voy a entregar su cetro: pequeño virrey del país de las camas vacías y de los muertos en casa. Con su lealtad a ciegas al presidente, usted solo ha dado palos de ciego pero se le olvidó que no son cifras sino seres humanos”, le espetó

López Gatell esbozaba una sonrisa nerviosa y abría los brazos en señal de interrogación.

“No te bastan los 83 mil muertos, cuantos más quieres para renunciar? , fustigó la también panista Marta Márquez.

Abajo senadoras de Morena como Marta Micher insultaban a las panistas. “Cállate o salte”, le reviró Lily Téllez. Micher manoteaba y Téllez le señalaba con el dedo índice la salida del recinto.

El presidente de la Comisión de Salud, Miguel Angel Navarro intervino y pidió respeto para el Senado. “Pido respeto para un Senado de dignidad”, demandó.

La también panista Martha Márquez, recurrió al nuevo etiquetado frontal de alimentos y extendió una manta detrás del encargado del combate a la pandemia en México donde se leía:

“Exceso de ineptitud” y “exceso de soberbia”. De inmediato desplegó una caricatura de López Gatell donde se le observa tapando con una sábana los muertos por COVID-19 y con esta frase: “¿Cuántos muertos van? Los que usted diga, señor Presidente”.

Fue ahí cuando, el presidente de la comisión de salud, el morenista, Miguel Angel Navarro decretó la suspensión de la comparecencia “por falta de garantías”

Fueron cuatro horas de una comparecencia ríspida que por momentos amenazó con desbordarse entre panistas y morenistas quienes trataban de defender a López Gatell de la lluvia de cuestionamientos.

¿CUANTOS MUERTOS MAS PARA TU RENUNCIA?

“¿Cuántas muertes más, valen su renuncia? Pareciera que 83 mil no son suficientes. ¿Qué hace falta para que renuncie por dignidad o al menos por respeto a su profesión y al momento crítico que vivimos?”, le soltó la senadora de Movimiento Ciudadano, Verónica Delgadillo

La senadora jalisciense acusó al subsecretario de incurrir en acciones criminales y le exigió la renuncia porque “no hay nada bueno que le podamos reconocer que usted haya hecho bien”.

“Excepto una cosa, y es que usted sí se lavó las manos, pero de ser responsable en el manejo de esta pandemia. Se lavó las manos de su juramento médico y eso, se lo digo Subsecretario López-Gatell, es criminal”.

Eso –agregó–lo hace a usted un criminal: Criminal es no haber preparado al país durante los 3 meses que tuvieron antes de que llegara el coronavirus; criminal es haberle dicho a la gente que el cubrebocas no era útil cuando sí lo era.

“Criminal es usar su espacio para quedar bien con su jefe mientras el coronavirus convierte a México en un cementerio, criminal es no haber atendido las recomendaciones nacionales e internacionales de hacer pruebas, pruebas y más pruebas porque quisieron aplicar la de Trump: sin pruebas no hay casos, Criminal es haber dicho públicamente que habían domado la curva de contagios cuando la realidad era otra

Criminal es abandonar al personal médico a su suerte, los que están en la primera línea de batalla, criminal es haber dicho públicamente que habían domado la curva de contagios cuando la realidad era otra, criminal es mentirle una y otra vez de manera descarada a la gente de este país”, le recetó

“Subsecretario López-Gatell, ¿usted sería capaz de ver a los ojos a los familiares que han perdido un ser querido, que no tuvieron cama, ni medicamentos, ni atención, y les podría decir que de verdad ha hecho todo lo que estaba en sus manos para salvarles la vida?”, retó

Un López Gatell que solo atinaba a sonreír nervioso, o bien aplaudía. Incluso se llevaba las manos al corazón en señal de cariño. “No ponga su mano en el corazón que no es bienvenido en el Senado señor subsecretario, aquí las senadoras de Morena hasta un baby shower le querían hacer…”, fustigó Lily Téllez.

“Su gestión se ha caracterizado por sus numerosas contradicciones y desatinos. (…) Simplemente estamos hartos de sus mentiras y contradicciones y frente a la crisis sanitaria más grave de nuestra historia, exigimos y merecemos certeza”, le recriminó la priísta Nuvi Mayorga

López Gatell volteaba a ver a los lados en busca de apoyo moral de sus correligionarios. No bien se acomodaba en su lugar cuando la secretaria de la Comisión de Salud, la panista Martha Márquez arremetió : “usted solo transmite un mensaje de muerte y derrota”, le soltó

“Está subido en un ladrillo y por eso no respeta la Constitución, menos a los mexicanos”, agregó

De hecho lo acusó que si bien ostenta estudios de especialidad en Medicina Interna, maestro en Ciencias Médicas y doctor en Filosofía, “su cargo de subsecretario lo está realizando como un niño de primero de primaria”.

Molesto, López-Gatell aprovechó su turno para contraatacar y atribuyó esos embates a legisladores que representan a una minoría rapaz que estuvo a punto de la inviabilidad y el estado fallido cuando gobernaron.

“Por eso sorprende pero no es inexplicable que hoy haya representantes de esa minoría que haciendo uso del foro parlamentario pretendan dar lecciones de moralidad ética y probidad cuando todos sabemos y el pueblo en su conjunto conoce perfectamente la historia”, reviró

Fue de lo último que alcanzó a decir en su comparecencia ante senadores pues de inmediato aparecieron las mantas y con ello el decreto de suspensión del acto.