¡Vacúnate, es por el bien de todos!

¡Credencial en mano! ¡Credencial en mano! Es la insistente petición del personal de apoyo asignado a la sede de vacunación contra el Covid-19 que opera en la cabecera de Cunduacán. Es el quinto día, de un total de seis que permanecerá abierta como parte de la campaña para proteger a la población mayor de 60 años con la aplicación masiva del biológico de AztraZeneca.

Han sido jornadas de intenso esfuerzo y trabajo por parte del equipo de salud estatal. Con apoyo logístico de trabajadores de Bienestar federal y brigadas del Ejército Mexicano han logrado vacunar a más del 60 por ciento de los casi 14 mil adultos mayores registrados previamente en la plataforma ‘Mi Vacuna’ del Gobierno Federal, aunque la resistencia a suministrarse el producto que genera inmunidad frente a uno de los padecimientos más letales del orbe, aún permea.

‘La vacuna es segura; hasta el momento no hemos tenido alguna reacción alérgica importante a ella; es vital que las personas acudan ahora para que puedan aplicarse más adelante la segunda dosis de refuerzo’, advierte la doctora Elizabeth Baz Rojas, jefa jurisdiccional de salud, a quien se le ha visto bastante activa a lo largo de la semana, coordinando a las brigadas y orientando a quienes aún tienen dudas con respecto a la eficacia del agente de carácter profiláctico.

Son las 07:50 de la mañana de este 19 de febrero y a las afueras del centro de convenciones local ‘Mireya Ruiz Quero’ ya se observa una larga fila con decenas de personas aguardando su ingreso a una de las cuatro sedes de vacunación habilitadas este viernes en el municipio. Lo mismo sucede en el área de acceso al estacionamiento del inmueble, donde hay mesas de atención para aplicar el compuesto a quienes llegan en vehículos.

Hoy es un día con tintes especiales y así se respira en el ambiente. Sobre el límite de la hora de inicio de labores hay pequeños grupos de trabajadores que intercambian opiniones.

La víspera hubo denuncias contra ciudadanos de otros municipios que, con engaños, abusaron de la buena fe de los profesionales de la salud y lograron que se les suministrará en Cunduacán la primera dosis. Este reprobable comportamiento que generó irritación ciudadana, de ninguna forma mancha el papel de médicos, enfermeras, trabajadores sociales y personal de apoyo que acumulan incontables horas de servicio en bien de la comunidad, pero sí los pone en alerta.

El bullicio que provoca el zumbido de las hélices de un dron que sobrevuela la zona, mezclado con el chirrido de insectos y el trinar de pájaros, contrastan con la fría mañana marcada por ligeras lloviznas, pero también son el presagio de las vertiginosas horas que están por venir.

La esperanza que despierta en la gente la llegada de una vacuna contra el coronavirus, una enfermedad que ha cobrado la vida de más de 2 millones de personas en el mundo, hace que cientos de cunduacanenses inscritos en la Fase 2 de la campaña nacional de vacunación, pierdan el miedo y opten por el biológico fabricado para contrarrestar la amenaza del virus.

Sin contratiempo, en punto de las ocho de la mañana, don Carlos Peregrino Gerónimo, de 64 años de edad, encabeza la avanzada del primer grupo de 10 personas que es conducido hacia el filtro sanitario colocado en el interior del convenciones y que antecede a la zona de triage, donde responderán un cuestionario para determinar si son aptos o no para recibir el compuesto.

‘Aún hay tiempo’

¡Credencial en mano! ¡Credencial en mano! Se les repite una y otra vez a todos, para aligerar el proceso de revisión de identificación personal. La confirmación de domicilio es un requisito que se ha endurecido como resultado de los acontecimientos de ayer. Los ojos de don Carlos, que sobresalen por encima del cubrebocas, son expresivos. Denotan alegría, sí, pero también la ansiedad que lo invade minutos antes de recibir el pinchazo en el hombro izquierdo.

Es originario de la ranchería Huacapa y salió en motocicleta, de su domicilio en la colonia Salamanca, desde las cinco y media de la mañana para ser de los primeros en pasar. Objetivo cumplido. Es el primero de todos. A las 08:06, se medio quita la chamarra verde olivo que lleva puesta, para descubrirse el torso. El líquido dentro de la jeringuilla ingresa a su organismo.

No hace aspaviento. Quien dedicó toda su vida a las cuestiones de la construcción, es conducido al área de observación, donde por espacio de 30 minutos, al igual que los demás que comienzan a llenar la sillas acomodas a sana distancia, es monitoreado continuamente por médicos. No hay ninguna reacción adversa. Todo normal y de vuelta a su hogar.

Se va ‘agradecido con el gobierno por todo lo que ha hecho’ para protegerlos, se sincera, y lanza una sentencia que comienza a correr de voz en voz en todos los centros de vacunación. ‘¡Qué bueno que se acuerden de las personas adultas y seamos los primeros porque somos los más vulnerables!’, acentúa.

A los escépticos, Peregrino Gerónimo les envía un mensaje de certeza para que no dejen pasar la oportunidad que están otorgando las autoridades, al suministrarles una vacuna que es totalmente gratuita: ‘no tengan miedo, tenemos que vacunarnos si queremos seguir con buena salud’.

La jurisdiccional Elizabeth Baz se suma a esta convocatoria, pero la complementa con un detalle que no hay que pasar por alto. ‘Las personas que acudan ahora van a tener la garantía de una segunda dosis; si la gente no toma la primera no se van a poder registrar para la segunda toma, lo que implica que su esquema se va a dificultar”, anticipa.

La doctora asegura que aún hay tiempo para que los que así lo desean, acudan este sábado a los centros de vacunación, en horario de ocho de la mañana a tres de la tarde.

Otro paso rumbo a la normalidad

Por lo pronto, informa, este 19 de febrero fueron vacunados otros 2 mil adultos en los centros instalados en el convenciones, así como en el casino social de la ranchería La Piedra segunda sección; la primaria rural federal del poblado ‘Carlos Rovirosa Pérez’, una localidad conocida popularmente como Tulipán; y el casino social del poblado Libertad.

Insiste que los registrados en la plataforma oficial ‘pueden acudir a la sede más cercana, siempre y cuando sean residentes del municipio de Cunduacán y ésto pueda ser comprobable a través de una identificación oficial’. Las cartas de residencia extendidas por delegados municipales no son válidas como comprobante de domicilio y no están siendo aceptadas, sentencia.

Las reglas se han hecho extensivas a las demás sedes y así lo confirman la señora María de Lourdes Pérez López, octagenaria de la ranchería Pechucalco, sector Las Cruces, quien recibe el biológico en el módulo de la ranchería La Piedra; Wilber Pérez Olán, vecino del ejido Casa Blanca primera sección, quien a sus 65 años acudió a la sede de Tulipán, y Miriam Escalante López, sexagenaria del ejido Reforma, pero vacunada en el centro del poblado Libertad.

Todos los núcleos registran buena afluencia. Hay orden e impera la cordialidad. Llegan a pie, incluso algunos apoyados con bastones o del brazo de sus hijas, hijos, nietos o conocidos; llegan en automóviles particulares, taxis, combis o pochimóviles del servicio público de transporte; los más vigorosos arriban en motocicletas y hasta en bicicletas. No importa el modo, lo importante es acabar con la zozobra que provoca el virus SARS-CoV-2.

‘Está magnífico que esta campaña inicie con las personas de la tercera edad. Fue una decisión acertada del presidente Andrés Manuel López Obrador que, con la ayuda del gobernador Adán Augusto López Hernández, se está concretando en Tabasco. La vacuna es sólo un paso para recuperar la normalidad y volver a estar reunidos con nuestras familias’, coinciden. Aquí no hay scripts, las palabras salen del alma.