El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presumió este lunes que en el país no hay «vacunación secreta» de altos funcionarios y puso como ejemplo que buena parte de miembros de su Gobierno han estado enfermos de la covid-19, incluido él mismo.
«No se ha abusado, (no ha habido) toda esta situación que se ha presentado en varios países de que hay vacunación secreta para los de arriba. Es muy importante esto», expresó el mandatario en conferencia de prensa en Palacio Nacional.
«No hay preferencia para nadie. Es evidente que nos ha dado covid a los servidores públicos del Gobierno, del más alto nivel. Al presidente, al secretario de Marina, al secretario de la Defensa, al subsecretario responsable de la campaña contra el covid y a muchos otros», ejemplificó.
Con estas palabras López Obrador se diferenció de otros países de la región como Perú, donde se destapó el llamado «Vacunagate», un escándalo político de vacunaciones en secreto de altos funcionarios, o Argentina, donde fue cesado el ministro de Salud por el presunto acceso privilegiado a la vacuna por parte de allegados al poder.
El presidente mexicano, que asumió el poder en 2018 con la promesa de acabar con la corrupción, dijo que «antes todo era influyentismo» en México, pero ahora los miembros del Gobierno dan «ejemplo».
«Es cuestión de esperarnos. Va a haber vacunas para todos», dijo el mandatario, quien recordó que por ahora se está vacunando en el país a los adultos mayores de 60 años en los municipios más desfavorecidos.
El subsecretario de Salud y estratega del Gobierno contra el coronavirus, Hugo López-Gatell, de 51 años, anunció el sábado que dio positivo a la covid-19 y que se confinó con síntomas que «afortunadamente son leves».
La semana pasada también se contagió el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, quien se sumó a la lista de al menos siete ministros del Gobierno federal enfermos de la covid-19 desde el inicio de la pandemia en México el 27 de febrero del 2020.
También estuvo enfermo durante las últimas dos semanas de enero el presidente López Obrador, de 67 años, hipertenso y reacio a usar en público el cubrebocas.
El país, con 126 millones de habitantes, tiene comprometidos 34,4 millones de dosis de la estadounidense Pfizer, 79,4 de la británica AstraZeneca, 35 de la china CanSino, 24 de la rusa Sputnik V, 10 de la china Sinovac y 51,4 de la plataforma Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con más de 180.000 muertos y más 2 millones de contagios, México es el tercer país del mundo con más decesos por la pandemia, detrás de Estados Unidos y Brasil.