De los trasplantes de órganos, el de riñón es en el que los especialistas médicos de Tabasco han más incursionado, desde hace 1999, cuando se realizó la primera de muchísimo más operaciones exitosas en el Hospital Gustavo A. Rovirosa Pérez, el cual se convirtió en un centro pionero y de formación nefrólogos.
Uno de ellos, es el doctor Humberto Muñoz Pérez, quien este fin de semana encabezó el trasplante de riñón número 31 en la Clínica Santa Cruz, donde es responsable del programa de trasplante y hemodiálisis.
«Yo me siento muy orgulloso de pertenecer a este equipo que trabajamos aquí en la Santa Cruz, previamente trabajé con mucho gusto por 27 años, en el hospital Gustavo A. Rovirosa, donde me siento muy orgulloso de ser el pionero de la nefrología», sostuvo.
En el equipo de operación que encabeza el doctor Muñoz participan un total de 15 especialistas, entre estos cirujanos, enfermeras y nefrólogos, además de Ricardo Alberto Vázquez Hernández y Wilbert Vicencio Torres, quien es coordinador del área Nefrología del Hospital Juan Graham.
Muñoz explica que el trasplante es la alternativa para pacientes que como resultado de una diabetes o problemas de falta crecimiento de los riñones, padecen insuficiencia renal y se han agravado o corren el riesgo de ello.
«Desafortunadamente hay una referencia muy tardía a los nefrólogos, no los mandan, cuando llega el paciente a la consulta, nos vemos con la sorpresa de que llegan con un estadío 5, que es un estadío avanzado, y nada más nos queda que ofrecerle hemodiálisis o trasplante renal», apuntó.
Este sábado, los doctores Humberto Muñoz, Wilbert Vicencio y Ricardo Alberto Vázquez se alistaron para realizar un trasplante a un joven de 23 años, a quien le sobrevino insuficiencia renal, como consecuencia de que sus riñones no crecieron a lo largo de su vida, pero, recalca, es una operación que puede duplicar la expectativa del paciente.
«La expectativa de vida de un paciente que se trasplanta se aumenta 200 por ciento. El promedio de vida de un paciente en hemodiálisis puede ser de 5 a 7 años. Entonces, si nosotros sacamos números, un paciente trasplantado de riñón con los cuidados necesarios por parte de nefrólogo, por parte del mismo paciente, puede tener una supervivencia arriba de 25 años», explicó en entrevista.
Y no sólo mejora la expectativa de vida, recalca el nefrólogo, sino también mejora el costo del tratamiento, que es la diálisis o hemodiálisis.
«El ahorro desde el punto de vista económico de un paciente que se trasplanta, es 50 por ciento mayor en 5 años. Es decir, el paciente trasplantado, además tener una buena calidad de vida. Este, pues, se ve beneficiado desde el punto de vista económico», citó el especialista.
Un trasplante como la que se le practicó este fin de semana a un joven, según anticipa el cirujano Ricardo Vázquez, puede tener una duración de cuatro a seis horas y explica que antes de la conclusión misma, es posible confirmar el éxito.
«El saber cómo le va al paciente, pues se podría decir que es inmediato. Si al ver la perfusión que tiene el órgano, al empezar a producir orina, al empezar ya a ver una función de este riñón inmediata. Eso te da la tranquilidad y la certeza de. De que el trasplante ha sido exitoso», aseveró.
Víctor Manuel Córdova del Campo, padre del joven paciente, comenta que haber llegado a la etapa del trasplante riñón, lamentablemente, fue después de haber pasado cuatro años de incertidumbre sobre cómo atender el problema de salud de su hijo. Fue un tiempo en el que, confiesa, en cuatro ocasiones estuvo en coma.
«Tuvimos mucho, mucho que batallar, puesto que se vio muy muy delicado con este tipo de situación, hasta que de alguna manera nos acercamos con el nefrólogo de nuestra clínica y fue el que nos orientó de alguna manera qué podíamos hacer, cómo podíamos solucionar o ayudar a que no tuviera este tipo de padecimiento.
Entonces, pues nos orientó a ver la posibilidad de un trasplante y por eso estamos», apuntó.
Y es por esa experiencia, que don Víctor Córdova exhorta a quienes tienen algún problema con insuficiencia renal a no temer y considerar la posibilidad de un trasplante.
«Yo lo que recomiendo pues que se quiten ese mito de que esto ya no es, que no es seguro que todo lo que dice la gente. Y les recomiendo que vayan con su nefrólogo de cabecera o que busquen el coordinador de su clínica. Ellos nos pueden orientar», aseguró.