Un ataque con drones por parte de Estados Unidos en Afganistán ha matado al líder supremo de la organización terrorista Al Qaeda, Aymán al-Zawahiri, según informan agencias y medios de EEUU.
Al-Zawahiri era considerado el cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001 que dejaron casi 3.000 muertos en Nueva York. El presidente Joe Biden hablará por televisión sobre esta «operación antiterrorista exitosa», según la Casa Blanca, que todavía no quiso dar más detalles.
Un funcionario del gobierno estadounidense afirmó que Estados Unidos llevó a cabo durante el fin de semana una «operación antiterrorista contra un blanco importante de Al Qaeda» en Afganistán, sin mencionar a Ayman al Zawahiri. La operación «fue exitosa y no hubo víctimas civiles», dijo.
Según los medios estadounidenses, Ayman al Zawahiri podría haber muerto en un ataque con drones llevado a cabo por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en la capital afgana, Kabul.
Esta operación que podría suponer el fin de Al Qaeda, cuyo anterior líder, Osama Bin Laden, también fue asesinado por EEUU durante el mandato de Barack Obama, en aquella ocasión tras una operación secreta en Pakistán.
Al Zawahiri había sido un miembro de los Hermanos Musulmanes, pero de su versión más radical, y estaba considerado como el hombre que radicalizó a Bin Laden en los años ochenta y le llevó a romper con líneas islamistas más moderadas en la ‘yihad’ (‘guerra santa’) de Afganistán.
Al-Zawahiri, nacido en Egipto e involucrado en el asesinato del presidente de ese país, Anuar el Sadat, fue un miembro de ese grupo antes de convertirse en el principal ideólogo de Al Qaeda y, según muchos, en su virtual líder, relegando a Bin Laden a un papel ornamental.
Después del asesinato de Sadat, la policía egipcia le arrestó. Fue torturado. Y, después, diría una frase memorable: «La muerte es más misericordiosa que la tortura».