Gracias a los avances en neurología y la tecnología para cirugías de mínima invasión, médicos del Hospital del Niño consiguieron, sin necesidad de abrir el tórax, extirpar el timo en una menor, que es la mejor opción en niños para reactivar su sistema inmune y recuperar funciones musculares, como caminar o el habla, que pierden por fatiga a lo largo del día.
Esta deficiencia de inmunidad, se llama miastenia gravis, que es ocasionada por una interrupción en la comunicación entre los nervios y los músculos, como consecuencia de falta de un neurotransmisor vinculado a la contracción muscular.
La ciencia médica ha descubierto que la mejor opción para contrarrestar este problema autoinmune, es la timoctomía, que es retirar el timo, pero en el Hospital del Niño, según su directora, Silvia Gutiérrez Lucatero, se incursiona desde hace cinco años con cirugías de mínima invasión, en lugar de abrir el tórax.
“En este caso, lo trascendental de lo que nos ocupa es que esta niña se le realizó un procedimiento quirúrgico de mínima invasión, eso es muy relevante y muy importante para nosotros que manejamos este tipo de casos. Entonces, es lo relevante, el tipo de técnica que se utilizó y que estamos seguras o seguros todos en la institución que pues ya va a ser como que parte del día a día de este hospital”, apuntó.
Con esta práctica, sostiene, en la que con mas frecuencia, el Hospital del Niño mejora su curva de aprendizaje, cada vez más niños podrán ser atendidos con el fin de evitar que la miastenia gravis, les deteriore su calidad de vida, no poder realizar funciones vitales, como respirar, ante un cansancio progresivo en el día.
“Este tipo de padecimiento que es una miastenia. Hace que estos pacientes de pronto vayan perdiendo la fuerza, como conforme va avanzando el día y esa fuerza se va perdiendo, que puede llegar a perder hasta el esfuerzo para respirar. Y estamos de acuerdo que un niño que no respira a un ser humano que no respira los siguientes, que venga un paro cardíaco y que el paciente se ponga muy mal”, aseveró.
José Ovidio Cornelio Nieto, jefe del Departamento de Neurología Pediátrica, que es el área que diagnostica este padecimiento, explica que el origen es una reacción de autoinmune del individuo, que inhibe la producción de un neurotransmisor que facilita las funciones musculares.
“En esta enfermedad se desencadenan auto anticuerpos contra el receptor de la acetilcolina. Haga de cuenta que si tuviera el músculo 20 guantecitos esos anticuerpos dejan nada más como cinco guantes, donde va a entrar la acetilcolina. Entonces, está disminuido el sitio donde va a actuar ese neurotransmisor y no se puede producir el fenómeno de contracción muscular”, apuntó.
Al respecto, añadió que “la miastenia gravis es una enfermedad que afecta un 10 a 20 individuos por cada 100.000, pero en pediatría el 15% de los niños con enfermedades que llegan a la Clínica de Neuromuscular de Neurología Pediátrica tienen este padecimiento”.
Explica que si bien el tratamiento a este padecimiento mejora con medicamentos al de la timoctomía, en el Hospital del Niño, desde hace cinco años, se evolucionó al grado tal, que esta cirugía sea lo menos invasiva y así, evitar la apertura del pecho, que significaba estar en terapia intensiva después de la operación, y más tiempo de recuperación.
“Antes era el tratamiento medicamentoso. Cuando se empezó a tener un poquito más de experiencia en que quitar el timo podría producir la mejoría total del paciente, de la paciente, porque se sospecha que ahí se producen estos anticuerpos. Entonces, era una cirugía muy cruenta porque había que abrir todo el esternón y de eso se va a encargar de explicarlo bien el doctor, que es el experto en eso. Pero ahora eso ya no se tiene que hacer”, manifestó.
¿Y qué niños pueden ser candidatos a una timectomía? Según el doctor Cornelio Nieto, aquellos que tienen tan acentuada la Miastenia gravis que a lo largo del día, sufren de una fatiga muscular que prácticamente les impide realizar algunas funciones, por lo que describió las siguientes características:
“El niño se puede levantar en la mañana bien, pero conforme va pasando el transcurso de la mañana, sus párpados empiezan a caerse y ya tiene que levantar la cabecita así para mirar. O a veces, se levanta los párpados para ver. Empiezan a tener dificultades, a veces en ya en mover sus brazos y al principio de la mañana se lograban peinar. En el transcurso del día ya no pueden ni levantarlo porque se va debilitando la musculatura, también se debilita la musculatura del rostro, empiezan a tener una cara inexpresiva. Si en la mañana hacían gestos el medio día o ya no se les ve la cara, se les ve triste la cara, incluso pueden tener. A veces la voz empieza a cambiar a lo largo del día”, explicó.
Vicente Sánchez Paredes, encargado del Departamento de Cirugía de Tórax y Endoscopía, señala que Irma, es una joven detectada con este padecimiento en la Clínica Neuromuscular del Hospital, por lo que, después de estudios de neurología, se determinó que sí era le conveniente para la extracción del timo, una opción que hasta hace unos años, se hacía con apertura de en la zona del esternón, por lo que era muy cruenta.
“Eso es algo muy doloroso de abrir un hueso, sin contar el aspecto estético que finalmente para un niño es muy importante también. No es lo mismo tener una cirugía que no se te nota, que tener una cirugía que lamentablemente en este procedimiento que se hacía antes se notaba inmediatamente por mucho que usaran playera. Finalmente, cuando se vestían ellos, se veía en el espejo y se veían la cicatriz grandísima en esta parte”, subrayó.
Ahora, destaca, el Hospital del Niño ha avanzado en tecnología de mínima invasión, y en los últimos cinco años, ha realizado otras cuatro cirugías similares.
“Hoy en día, contamos en el Hospital del Niño con la tecnología adecuada para poder hacer este procedimiento por una técnica que se llama de mínima invasión. Mínima invasión se refiere a que, a través de unos agujeros muy pequeños, dos agujeritos muy pequeñitos de cinco milímetros y uno un poquito más grande de un centímetro. A través de ahí, introducimos una cámara y un instrumental especial con el que contamos en el hospital y hacemos la recepción de esa glándula sin necesidad de tener que abrir”, indicó.
La ventaja de este tipo de operaciones, refiere Vicente Sánchez Paredes, es que el paciente se recupera de inmediato, y cuestión de 4 días, es dado de alta, por lo que también representa ahorros en hospitalización.
“El paciente primero sale extubado. Esto quiere decir que estos pacientes, cuando se operaban, previamente, debido al dolor a que la caja torácica, que es la que se encarga de respirar, no se podía mover por la cirugía, pues el paciente tenía que salir con un tubito en su garganta para que una máquina respirara por ellos, en lo que disminuía el dolor, en que mejoraba un poquito la la unión del esternón y por lo tanto, el paciente pudiese respirar por sí solo. Eso implicaba por lo menos tres o cuatro días de terapia intensiva y de uso de ventilador, que si tuviésemos que hablar de costos estamos hablando aproximadamente de unos 50 a 100 mil pesos por día, en costos de enfermeras, medicamentos, uso de equipo, monitorización”, sostuvo.
Sánchez Paredes asegura que con este tipo de cirugía, con la que Tabasco se coloca a la vanguardia en el sureste, es también de satisfacción para el Hospital del Niño saber que se recuperarán más rápido de la operación, como de sus capacidades motrices, por lo que, presume, que trata de un “boom” en la tecnología de cirugías.
Dice que también es “boom” en el estado sicológico de los niños que pasan por esta enfermedad, porque su estado anémico mejora de inmediato, al recuperar sus funciones.
De Irma, refiere, al día siguiente, subió a otro piso para ver a sus padres, y a él le preguntó que si donde le había operado, porque nosentía molestia alguna.
Por estos resultados, Lorena Martínez Trejo, madre de la joven paciente, dice estar muy agradecida por todo el proceso que se le dio a su hija por parte de los especialistas del Hospital del Niño, desde el diagnóstico de la miastenia gravis, el periodo de observación en su etapa de recuperación.
“La institución nos ha nos ha respondido muy bien y el tratamiento que nos ha dado el doctor Ovidio y el doctor Vicente, que es una, no es muy común, pero este ha sido satisfactorio para la salud de mi hija y pues, que sigan ayudando a niños con esta enfermedad de miastenia graves”, finalizó.