Los beneficios serán para todos, coinciden testigos de la colocación de primera piedra del histórico proyecto: casas del Bienestar

Sobre lo que antes eran fragmentos de acahuales, plataneras y maizales, en la zona conocida como el Habanero, al suroeste del municipio de Huimanguillo, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y el Gobernador de Tabasco, Javier May Rodríguez, dieron el banderazo para que una retroexcavadora pusiera el bloque de lo que serán las primeras Viviendas de Bienestar en territorio tabasqueño.

“La ceremonia es de gran significado”, señaló don Juan Cruz, quien vive del otro lado del terreno dividido por un camino de terracería que todavía no tiene nombre.

«Va a traer muchos beneficios para todos”, declaró afuera de su hogar el vecino, donde vive con su familia, integrada por cuatro miembros. “El que esté más poblado traerá más seguridad y servicios a los vecinos; además de que habrá trabajo», dejando ver su ánimo para solicitar una vivienda y dejar de rentar.

En los postes, junto al camino, ya se han colocado reflectores potentes que alumbrarán los árboles de mango de los alrededores, a las cuadrillas de trabajadores y a las cinco retroexcavadoras que acelerarán los trabajos de construcción, colocadas detrás del escenario, esperando el banderazo de salida.

Del centro de la cabecera municipal, don Mario Casado llegó temprano al lugar porque quería alcanzar asiento y saludar a la Presidenta de México. Conoce las colonias aledañas: la Frutales, la Walter Herrera y la Valle Verde, pero su incógnita es saber cómo se llamará la nueva colonia de casas del Bienestar.

«Las colonias se pueblan así, de a poco. Va a estar bueno, va a agarrar vida esta colonia, ya lo verán», dijo el abuelo de 83 años, de oficio carpintero, frotándose las manos, como si ya la estuviera contemplando.

Exactamente, cuando arribaron al evento los titulares del Ejecutivo federal y estatal, a las 18:07, entre los gritos de «Presidenta presidenta” y «Viva May», el tronar de las matracas y silbatos, se oyó el cornetín de don Martín Rivera Ramos, vecino del poblado C-9, de Cárdenas.

«Vine a apoyar a la Presidenta y al Gobernador, y aunque no he metido mi solicitud, aquí estoy, porque creo en la transformación. Mi esposa va meter la solicitud», contó contento el hombre de campo, sin dejar de sonar su instrumento y aplaudir, sobre todo cuando la Presidenta preguntó «¿es buen Gobernante Javier May?», uniéndose a la multitud en un rotundo «sí». La comandanta suprema devolvió a la multitud: «Gran Gobernador Javier May».

Antes de acabar el evento, los asistentes escuchan la invitación que les hace la Presidenta para ponerle nombre a la nueva colonia que nacerá con la construcción de las casas de Bienestar. Don Mario Casado abandona el lugar buscando en sus pensamientos, un gran nombre para un gran proyecto.

Acerca de NOVEDADES

Te puede interesar

Papa Francisco agradece muestras de apoyo

El Papa Francisco, hospitalizado desde hace 31 días por problemas respiratorios, aseguró este domingo estar …