En el marco del 28 aniversario del Centro Nacional de Prevención y Control de Enfermedades (CENAPRECE), autoridades de salud destacaron los avances en la reducción de enfermedades transmisibles y no transmisibles en México, mediante estrategias integrales de prevención, detección temprana y atención oportuna.
El doctor Miguel Ángel Díaz Aguilera, director del Programa de Salud en el Adulto y el Anciano, subrayó que, a lo largo de la última década, el CENAPRECE ha fortalecido el primer nivel de atención a través de la evaluación continua de programas, capacitación de personal y modernización de sistemas de información, contribuyendo así a mejorar la respuesta ante emergencias epidemiológicas y a consolidar una política pública de salud basada en evidencia.
Actualmente, este centro coordina a nivel nacional siete programas sustantivos: Rabia y otras Zoonosis; Salud Bucal; Enfermedades Transmitidas por Vectores; Micobacteriosis; Salud en el Adulto y el Anciano (que agrupa las enfermedades cardiometabólicas y el envejecimiento); y Urgencias Epidemiológicas y Desastres.
Como parte de su compromiso con el bienestar de la población, el CENAPRECE impulsa la actualización de 14 normas oficiales mexicanas clave para la prevención y control de enfermedades, en coordinación con el Comité Consultivo Nacional de Normalización de Salud Pública.
Uno de los ejemplos más relevantes es la implementación de la iniciativa HEARTS, propuesta por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que desde 2020 se desarrolla en México bajo el nombre Corazones México. Esta estrategia fortalece la atención primaria para la prevención y control de enfermedades cardiometabólicas, con énfasis en hipertensión, diabetes y dislipidemia.
En cuanto al Programa de Salud del Adulto y el Anciano, el doctor Díaz Aguilera explicó que está conformado por dos subdirecciones: la de Enfermedades Crónicas, dirigida a personas mayores de 20 años con padecimientos como diabetes, hipertensión u obesidad; y la de Atención al Envejecimiento, enfocada en personas de 60 años o más.
En esta última, se promueve la atención centrada en la persona para mejorar la calidad de vida de las personas mayores, especialmente aquellas con dependencia. Actualmente, se estima que 12.6 millones de personas forman parte de esta población objetivo.
Desde 2007, el programa participa en la estrategia ICOPE (Cuidado Integral para Personas Mayores), desarrollada por la OMS, que busca preservar las capacidades físicas, mentales y funcionales de las personas mayores. En conjunto con el Instituto Nacional de Geriatría, el programa también elabora materiales informativos sobre factores de riesgo para demencia e impulsa la conformación de redes de servicios de salud integrados.
“El CENAPRECE seguirá trabajando con un enfoque preventivo, promoviendo la integración de estrategias técnicas, la cooperación interinstitucional y la atención centrada en las personas, para consolidar un sistema de salud más justo, equitativo y resiliente”, concluyó el doctor Díaz Aguilera.