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En un nuevo encuentro con habitantes de los pueblos indígenas de Tabasco, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a sus paisanos nunca olvidar sus orígenes, mantener sus tradiciones, continuar sus costumbres y seguir usando sus lenguas, “porque no hay que avergonzarnos de lo que somos y sentirnos orgullosos del habla de nuestro pueblo”.
En pleno corazón de las comunidades indígenas y en compañía del gobernador Adán Augusto López Hernández, el Presidente de todos los mexicanos se comprometió a implementar un fuerte programa para apoyar a todas las comunidades indígenas de Tabasco, con una estrategia para mejorar sus viviendas y resolver viejas demandas de agua potable, drenaje y la construcción de espacios deportivos.
“Vamos a construir y rehabilitar centros de salud y hospitales de toda esta región e impulsaremos un programa de vivienda para la gente humilde y para los pobres. No son créditos, son apoyos como los que dimos hace 42 años en todas estas comunidades. Vamos a dar materiales y vendrán técnicos para ayudarlos, pero la gente tiene que apoyar y trabajar para hacer o mejorar sus propias casas”, aseguró en la villa Vicente Guerrero.
López Obrador señaló que se resolverán todos los problemas, pero atendiendo principalmente primero lo general, lo comunitario, el beneficio colectivo y luego se irán buscando soluciones a los planteamientos particulares, “porque se acabaron los tiempos en que solamente los apoyos eran para unos cuantos, para los líderes. Eso se acabó, ahora todo es parejo”.
Ante miles de centlecos que se dieron cita en el parque central de la villa, destacó que continúa recorriendo el país, recogiendo sus problemas y entregando soluciones, por lo que recordó que son más de dos mil 500 municipios en el país y más de 270 mil localidades, las cuales recorre “a ras de tierra, porque ya no hay helicópteros ni avión presidencial”.
El jefe del Ejecutivo federal señaló que continuará avanzando para que los apoyos lleguen a la gente más humilde, a la gente pobre de México, por lo que continuarán otorgándose la pensión a los adultos mayores, quienes antes sólo eran atendidos tres millones 500 mil adultos, que recibían mil 160 pesos cada dos meses, pero “hoy son más de ocho millones de adultos mayores que están recibiendo dos mil 670 pesos bimestrales”.
Junto al director del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes y la alcaldesa Guadalupe Cruz Izquierdo, dijo que también todos los niños y niñas pobres que sufran alguna discapacidad, están recibiendo su pensión, igual que los adultos mayores, que cuentan con un respaldo seguro para atender su discapacidad.
En la ceremonia, en la que también estuvo el secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer Falcón, dijo que hay becas para estudiantes de preescolar, primaria y secundaria, en tanto que cuatro millones 500 mil estudiantes de nivel medio superior o preparatoria, reciben sus becas para que no abandonen su escuela.
Aquí dio el dato de que el año pasado eran tres millones 900 mil estudiantes que recibían su beca, misma que aumentó esa matrícula a cuatro millones 500 mil, es decir, 600 mil se inscribieron o dejaron de abandonar la escuela y permanecen en ella.
“Y en el nivel superior son 300 mil jóvenes que reciben su beca de dos mil 400 pesos mensuales para que terminen sus escuelas, porque nunca voy a olvidar que pude estudiar la universidad con el apoyo que nos daban en la Casa del Estudiante Tabasqueño en la Ciudad de México, y ahora que soy Presidente no voy a dejar de apoyar a los estudiantes pobres”, puntualizó.
Cobijado por el entusiasmo de los miles de centlecos, especialmente de mujeres, el mandatario federal destacó que 900 mil jóvenes se encuentran en el programa Jóvenes Construyendo el Futuro, que se capacitan para el trabajo, por lo que todos los días firma certificados para que los usen como cartas de recomendación al momento de pedir un empleo.
Mencionó que se mantendrá el apoyo del programa Producción para el Bienestar, cuyos recursos llegan directo a los productores, sin intermediarios, como sucedía en antaño, cuando no llegaban completos, “llegaba con moche, con piquete de ojo, pero eso se acabó”.
Informó que ya se construyen dos mil 700 sucursales del Banco del Bienestar para que los 22 millones de personas que reciben un apoyo puedan recoger su dinero con tarjeta, puesto que actualmente no hay suficientes sucursales y deben ir hasta las cabeceras municipales para poder cobrar, pero ahora ya podrán hacerlo en sus pueblos.
Al refrendar su espíritu maderista para cumplir con el lema “Sufragio Efectivo, No Reelección”, subrayó que solamente será Presidente de México hasta el 2024, y se debe meter el acelerador y no perder el tiempo, como en el programa Sembrando Vida que culminará hasta que acabe su mandato, por lo que se debe aprovechar para sembrar todo.
López Obrador aseveró que también le cumplió a los maestros y acabó con la mal llamada Reforma Educativa, y declaró que le tiene toda la confianza al magisterio nacional. “Nos estamos poniendo de acuerdo maestras, maestros, padres de familia y autoridades para mejorar la calidad de la enseñanza, y quiero aprovechar también para decirles que ahora cada escuela va a tener su presupuesto para su mantenimiento, sin intermediarios”, enfatizó.
Reconoció que los pasados gobiernos dejaron hospitales y centros de salud olvidados, por los suelos, pero se comprometió a levantarlos con una inversión de 40 mil millones de pesos, para que todos los mexicanos reciban buena atención.
“Me tienen que ayudar paisanas, paisanos, porque nos dejaron un toro echado, viejo, reumático, mañoso, corrupto y lo tenemos que levantar entre todos y empujarlo para que vuelva a caminar, pero es un cuerpo de avance lento, y tenemos que empujar al gobierno. ¿Me van ayudar, paisanos?”, preguntó y al unísono, las miles de gargantas contestaron “sí”.
