Salud: Estamos lejos de restringir movilidad

La Secretaría de Salud declaró de manera formal el arranque de la fase dos en la propagación del COVID-19 en México, aunque vislumbró una transmisión “reducida” y rechazó la restricción de movilidad entre la población.

“La restricción de movilidad puede ser una medida de salud pública, pero no debe utilizarse como primera herramienta, es una herramienta extrema que se reserva a situaciones hipotéticas de pérdida de la capacidad de control. Lejos estamos de ello, de necesitar medidas que vulneren la vida pública o afecten garantías individuales”, señaló Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud.

Sin embargo, a los lineamientos anunciados con anterioridad como la apuesta por una sana distancia, el cuidado a adultos mayores y otros grupos en riesgo, y la suspensión de clases en todo el Sistema Educativo Nacional, se sumaron: la suspensión temporal hasta el 19 de abril de eventos con 100 personas o más -contrario a lo dispuesto por otras autoridades como la capitalina, inclinada a prohibir concentraciones mayores a 50 personas-, la cancelación de reuniones privadas, públicas, sociales o gubernamentales y la interrupción temporal de actividades laborales, en específico “aquellas que impliquen la movilización de personas de sus domicilios al trabajo y de regreso, o que estén llevando a la movilización en el espacio público, esto en todos los sectores de la sociedad”, explicó López-Gatell.

Ante la imposibilidad del paro total de instituciones, entidades u organizaciones privadas o sociales, de cuya actividad dependen todos los pobladores (como producción de alimentos, logística básica y servicios), solicitó a éstas “poner en práctica sus planes de continuidad de operaciones para garantizar su funcionamiento, y los derechos de trabajadores y usuarios”.

La declaratoria se hizo un día después del pronunciamiento de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cual ubicó a México como país con transmisión comunitaria.

La fase dos se declara cuando se presentan casos sin antecedentes de contacto con viajeros o cuando se dificulta la trazabilidad de los contagios. El funcionario la calificó como “una señal muy temprana”, pues sólo se ubica en esta variable alrededor del 1 por ciento de la incidencia.

“Todavía no hemos llegado al punto de inflexión donde cambiamos a una propagación muy acelerada, y esta es la oportunidad de México. El aprendizaje científico que hemos tenido por la experiencia vivida y la extensa documentación sobre el comportamiento del virus en el resto del mundo, nos da una ventaja: la de poder programar adecuadamente el momento de cambio de las distintas fases”, dijo.

“Por haber anticipado dos semanas antes las medidas generales, vamos a poder doblar la curva y a tener menor transmisión. La expectativa no es terminar con la epidemia de un momento a otro; el éxito en la reducción, en vez de llevarnos a una epidemia corta, nos llevará a una más larga, a administrar el riesgo: lograr que cada día haya menos casos de los que se puedan atender en la infraestructura de Salud y por eso son importantes las medidas de mitigación”, expresó con cierta dosis de optimismo.

La idea es anticiparse a la fase 3 de transmisión generalizada, la cual será inevitable y representa el mayor reto para el Sistema Nacional de Salud.

Según López-Gatell, por la concentración de población, el mayor número de casos y a más velocidad de contagio se presentará en la región metropolitana del Valle de México, otras zonas urbanas como Guadalajara y Monterrey y zonas turísticas de Quintana Roo.

En una petición inusual, instó al compromiso y responsabilidad de todo el personal de Salud, “porque no podemos entrar en ninguna clase de discordia, de distanciamiento emocional o de comunicación, organizándonos de una manera generosa entre todas las instituciones, podemos tener capacidad suficiente”.

Acerca de NOVEDADES

Te puede interesar

‘Colmena’, ha logrado atravesar la órbita lunar

La primera misión lunar de México y Latinoamérica, denominada ‘Colmena’, ha logrado atravesar la órbita …